Bajo la consigna “más valores y menos condones” el autodenominado 'concejal de la familia', Marco Fidel Ramírez, arrancó una campaña para que no se apruebe un artículo del proyecto de acuerdo 277 del 2014, el cual busca que en Bogotá se instalen dispensadores de condones en zonas públicas como bares, discotecas, restaurantes, centros comerciales, universidades y portales de TransMilenio. Con un video, el cabildante -que se proclama cristiano- explica las razones por las cuales está en desacuerdo con esa práctica. Para él eso posibilitaría que esas zonas se incentiven más encuentros sexuales y embarazos no planeados. “El condón no es garantía de sexo seguro”, dijo en una sesión del concejo capitalino. Otro de los argumentos del concejal es que la ciudad "no está preparada para masificar la distribución de los condones (…) no hay conducta de prevención”.  Incluso, alegó que el Distrito no puede promover el uso de condones. Indignado, Ramírez dijo que eso podría agravar el problema de embarazos no deseados y enfermedades sexuales. “Es una capricho ideológico más que un argumento científico comprobado”.  Además, según él entiende, tendía un impacto fiscal grande.  A finales de noviembre el concejal tuvo éxito con otro video en que descalificaba las fiestas de disfraces de Halloween, al considerar que eran satánicas y paganas.