Diana Sierra. Diana Sierra ha mejorado la calidad de vida de miles de mujeres adolescentes con un invento que les ha permitido estudiar y realizar sus actividades cotidianas sin temor. Diseñó una toalla higiénica usando tela impermeable de sombrilla y tela de mosquitero para que las niñas la rellenen con tela y la reemplacen cuantas veces sea necesario. Pero no se quedó ahí, al ver que muchas de ellas no tenían dinero para comprar ropa interior, ideó un segundo prototipo que integra esta toalla a un panti. Un invento sencillo, pero revolucionario que beneficia a miles de mujeres de escasos recursos y ofrece un buen ejemplo de innovación social. Esta diseñadora industrial colombiana, que vive en Estados Unidos, se inspiró de su experiencia en Uganda, África. Allí vio cómo la menstruación avergonzaba e incomodaba a miles de niñas sin recursos y las llevaba a abandonar la escuela antes que vivir una humillación pública. Esa profunda injusticia social negaba a esas futuras mujeres el derecho a la educación. Consolidó su idea cuando conoció una estadística según la cual una de cada diez niñas en el mundo no tiene acceso a productos sanitarios. Para distribuir su producto, Sierra, de 36 años, fundó Be Girl Inc., una empresa social que ha beneficiado a 25.000 mujeres en 12 países y tiene el reto de llegar a 400.000. Gracias a su sensibilidad e ingenio, ha logrado rescatar la dignidad de las adolescentes de escasos recursos que, para colmo de males, tienen que llevar a cuestas la vergüenza de tener el periodo menstrual, un hecho natural, pero satanizado por la sociedad. Y les ha ofrecido una oportunidad para no abandonar sus estudios con la esperanza de que en un futuro ellas puedan construir un mundo mejor que el que les tocó.