Los arroyos en Barranquilla no perdonan. Se han llevado carros, motos, casas, animales, personas, todo lo que esté a su paso. Una situación que, de nuevo, quedó evidenciada este jueves en la capital atlanticense. La fuerte corriente de un arroyo arrastró un taxi con su conductor y los pasajeros a bordo. Afortunadamente, el vehículo se detuvo cerca de las instalaciones del comando de la Policía Metropolitana y varios uniformados, con apoyo de ciudadanos, lograron un heroico rescate. En medio del torrente, los rescatistas cruzaron la calle y ayudaron a los pasajeros, uno a uno, a salir del carro. Después, cuando las personas estaban sanas y salvas, regresaron a empujar el vehículo y a resguardarlo hacia el andén en un sitio seguro para que no fuera arrastrado de nuevo. “La Policía de Barranquilla destaca el heroísmo de estos uniformados y mantiene su compromiso de ayudar en la prevención en este tipo de hechos cuando arrecie la lluvia en la ciudad”, dijo la institución.