Como resultado del minucioso trabajo de las autoridades, ha empezado a conocerse la magnitud de la barbarie y los excesos de los distintos actores del conflicto armado que por décadas ha vivido el país. Según la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas (UBPD), en los cementerios de la geografía nacional hay alrededor de 25 mil cadáveres por identificar, una tarea que por años han realizado la Fiscalía, Medicina Legal y decenas de organizaciones sociales. Ahora, tras el Acuerdo Pe paz, la JEP y la UBPD se suman a esa dolorosa labor, que parece interminable.
Durante al menos una década, el Grupo de Búsqueda, Identificación y Entrega de Personas Desaparecidas (Grube) de la Fiscalía ha intervenido 15 cementerios en los Llanos Orientales, la región Andina y el Pacífico, en los que ha exhumado 2.410 cuerpos enterrados como no identificados y, de ellos, ha entregado 401 a sus familiares. La JEP, por su parte, tiene en la mira diez cementerios en el Caribe, Antioquia y los Santanderes. La UBPD analiza otros siete espacios. Solamente en los Llanos Orientales, en los municipios de Villavicencio, Granada, La Macarena, Vistahermosa y San José del Guaviare, la Fiscalía ha exhumado 1.667 cuerpos que habían sido puestos allí como no identificados. En 10 años, en esa zona del país casi 300 cuerpos han sido identificados y entregados a sus familiares.