Una tormenta política se vivió el 10 de marzo cuando el Consejo de Estado determinó que suspendería al gobernador de Caldas, Guido Echeverri. Lo anterior, mientras establece si está inhabilitado para ejercer su cargo.  La decisión se tomó como una medida cautelar mientras se decide de fondo el asunto que está relacionado con la imposibilidad de que se lanzara a la campaña electoral del 2015.A juicio de los demandantes, Rafael Calixto Toncel Gaviria y Miguel Antonio Cuesta Monroy, el político caldense habría violado la prohibición constitucional de la reelección inmediata.El problema de Echeverri en el alto tribunal será sobre todo de interpretación. En términos prácticos, él no fue gobernador. Aunque había ganado la anterior elección, esta también había sido anulada por el Consejo de Estado.La razón en su momento fue que su esposa, Ana María Jaramillo, había sido la secretaria de Hacienda encargada en la Alcaldía de Manizales en el año anterior a la elección. Aunque la funcionaria solo estuvo allí por unos días y nunca tuvo el cargo en propiedad, en ese momento el alto tribunal consideró que eso constituía una violación al régimen de inhabilidades.El gobernador, que no ha recibido la notificación de su suspensión, le explicó a semana.com por qué considera que no debe ser suspendido de su cargo.