Las autoridades judiciales no salen de su asombro. En una zona aledaña a los cerros orientales, cerca de Monserrate, vivía un hombre que confesó haber asesinado a siete personas, todas presumiblemente mujeres. Se trata de Fredy Armando Valencia, un sujeto de 34 años que aceptó los crímenes y cuya noticia tiene consternados a los capitalinos.   En la zona la Policía ha encontrado a cuatro cadáveres, el primero fue hallado el pasado sábado cuando algunas personas alertaron a las autoridades por los malos olores. Tras una primera inspección, los patrulleros se toparon con el cuerpo de una mujer que estaba bajo bolsas de basura. Por la cercanía, ya que su ‘cambuche’ estaba ubicado cerca del lugar donde fue encontrado el primer cuerpo, Valencia pasó a ser en cuestión de minutos el primer sospechoso y por eso las autoridades procedieron a la captura. El domingo el hombre confesó haber asesinado a siete mujeres. De ese número Medicina Legal ya encontró tres cuerpos de los que solo queda su parte ósea. El relato del hombre ha sido revelador, en la audiencia reconoció la muerte de las mujeres quienes al parecer son habitantes de calle. Contó que luego de contactarlas, las convencía con promesas que iban desde comida hasta drogas. La idea era que accedieran a tener relaciones sexuales con él. Los primeros datos indican que el sujeto había cometido los crímenes desde hace cuatro años y no existía reporte porque se trataba de mujeres desarraigadas de su familia, consumidoras de droga e indocumentadas que vivían en la deprimida zona del Bronx. La forma en que cometía los crímenes por ahora es un misterio, sin embargo, Valencia confesó en la audiencia que asesinaba a las mujeres mediante asfixia mecánica, apretándoles el cuello. La Policía hace un barrido para encontrar otros posibles restos óseos y no descartan que tarden varios días. Incluso, la propia identificación de los cadáveres podría durar meses ya que no se encontraron tejidos blandos que ayuden a identificar el ADN. ¿Quién es el hombre? De Fredy Armando Valencia se sabe poco, salvo que es un habitante de calle que dice tener problemas mentales. La Policía logró determinar que este hombre vivió durante varios años en la localidad de Kennedy. El reporte señala que Valencia al parecer alcanzó a adelantar estudios hasta cuarto semestre de ingeniería, pero el consumo de droga lo llevó a salir de la universidad y desprenderse de su familia. Valencia no era un desconocido por la Policía. Ya había sido identificado en ocasiones anteriores, cuando las autoridades lo requirieron por consumo de estupefacientes.