Hace una semana, a través de un documento, la Arquidiócesis de Cali señaló que “la causa del daño es atribuible de manera exclusiva a las víctimas indirectas, quienes faltaron a su deber de cuidado, vigilancia, comunicación y protección de unos niños de 10 y 13 años”.Pese a la condena de 33 años de Mazo, 33 la defensa de los niños está pidiendo una indemnización para las víctimas. “Nosotros queremos el reconocimiento de estos hechos por parte de la Iglesia, cuando no hizo nada y estaba advertida oportunamente de los abusos que este sacerdote estaba cometiendo”, indica Montaña.El próximo 1 de marzo, los familiares de los niños abusados tienen programado un plantón en la Catedral Primada de Cali, con el fin de que se reconsidere su posición y se ofrezcan disculpas públicas.