Este lunes conversaron con María Jimena Duzán, Rafael Colón, Luis Alberto Villamarín, Jorge A. Restrepo y Álvaro Jiménez acerca del proyecto de desminado y el anuncio del cese de bombardeos a campamentos de las FARC. Respondiendo a la pregunta de cómo y dónde desminar, el director de Acción Integral contra Minas Antipersonal, General (R) Rafael Colón, sostuvo que los anuncios hechos este martes por el presidente Santos son una muestra de la voluntad del Gobierno por la paz. “En el caso de desminar el campo, ya se ha avanzado en proyectos de desminado humanitario con el fin de desarrollar operaciones más profundas. Asi, los campesinos puedan transitar por el territorio libre de minas. El Ejército hará un despeje de los territorios seleccionados y con prioridad en los sitios más amenazados. La realidad es que con este anuncio nos llenamos de optimismo ya que podremos profundizar la democracia a través de los proyectos de recuperación del territorio promovidos por el Gobierno. Todos creemos que lo que está pasando es el camino a la paz, aunque haya cuellos de botella. Ahora bien, si hay un militar que no esté de acuerdo con los mandatos del Presidente, debe pedir la baja”, puntualizó Colón. En contraposición con esta postura, el experto en defensa nacional, Coronel (R) Luis Villamarín, expresó que lo que aquí se ha visto es que las FARC han impuesto sus posiciones y el gobierno les ha hecho seguidilla. “Entrevistándome con un desmovilizado, él me expresó que no se ha separado totalmente de las FARC y que el mandato de Timochenko es que se sigan preparando para la guerra. No quiero ser aguafiestas, pero las FARC no se han comprometido con dejar de sembrar minas o de destruir los talleres para construirlas, realmente pueden estar limpiando una zona y minando otra. Puede haber buena intención del Presidente pero en estrategia militar, otra cosa es la realidad. Yo no estoy en contra de la paz, pero no creo en las FARC y creo que su estrategia tiene intenciones escondidas”, recalcó Villamarín. En desacuerdo con estos planteamientos, el director de la Campaña Colombiana Contra Minas, Álvaro Jiménez, afirmó que aunque la desconfianza es un elemento natural en quienes han sufrido los embates del conflicto armado, tener esperanza es una necesidad común. “La decisión tomada de desminar el territorio es un alivio para el campesino, no para las FARC. El problema de las minas es real, por más que se firme un acuerdo de paz, las minas van a seguir presentes. Así bombardeemos todo el Nudo del Paramillo no se reducirá el problema de las minas. Los civiles también somos actores de la guerra y la verdad es que no queremos más conflicto. Construir un país significa que los sectores enfrentados por décadas se sienten a discutir y echar para adelante. Les aseguro que la paz no la van a imponer las FARC”, dijo Jiménez. Finalmente, el director de la CERAC, Jorge Restrepo, fue enfático en afirmar que lo que sucedió en las últimas horas fue una jugada maestra del presidente Santos, pues la decisión tomada materializa la confianza en La Habana entre militares y las FARC. “Yo he manifestado que nos encontramos en un cese bilateral virtual, hoy asistimos a la oficialización de ese cese. Lo que sé es que hay una irreversibilidad del proceso, en el que ninguna de las dos partes va a volver a la violencia. De hecho, durante el cese unilateral decretado por las FARC se ha reducido la violencia de manera relevante. Frente al acuerdo de desminado humanitario, el paso que sigue es exigirles a las FARC que dejen de fabricar minas y sembrarlas. Está bien que haya oposición al proceso de paz, pero para que sea útil se debe hacer sobre los riesgos reales y no sólo criticar unas ideas”, concluyó Restrepo. Frente a la orden de aumentar las operaciones militares en contra del ELN, varios de los panelistas estuvieron de acuerdo en que aunque toca insistir en el llamado a conversaciones con ese grupo guerrillero, su negativa puede convertirse en un problema para las negociaciones con las FARC. La victoria militar para ese grupo guerrillero no es posible, así que deben aprovechar el momento actual y montarse en el tren de la paz. Tweets por el @Semanaenvivo.