La crisis de Hidroituango, que por meses ha tenido en vilo al país y a miles de personas del Bajo Cauca antioqueño, empezó por una “erosión progresiva de una zona de cizalla” en la Galería Auxiliar de Descarga (GAD) o tercer túnel, debido a “diagnósticos deficientes en la etapa de asesoría de la construcción”. Así lo explica el informe causa-raíz que contrató Empresas Públicas de Medellín (EPM) con la compañía noruego-chilena Skava Consulting, que además explicó que las cizallas son zonas de deformación del terreno que pueden tener milímetros o metros. El resultado no está lejos de las conclusiones que había presentado la Universidad Nacional hace unos cuantos meses, en un estudio solicitado por la Gobernación de Antioquia. De hecho, el gobernador Luis Pérez ha sostenido, dentro de sus hipótesis, que el túnel fue sometido a una presión para la que no estaba diseñado. “La erosión inicial se habría manifestado en la esquina inferior derecha (en dirección del flujo de agua), en el tramo posterior a la curva de la entrada de la GAD”, dice el informe, que precisa que en esa zona el agua tenía mayor velocidad. “El túnel en este sector fue sometido a distintos tipos de regímenes de flujo en un corto periodo de tiempo. Fluctuó entre flujo libre, en transición y presión más de una vez en pocos días. Dicho comportamiento contribuye a un daño acelerado sobre la capacidad estructural del túnel y el macizo circundante”, agrega. Haga clic aquí para continuar leyendo "Lupa a Hidroituango: ¿por qué se derrumbó el túnel?"