Pasaron dos años para que el ministro de Salud, Alejandro Gaviria, regresara a Carmen de Bolívar y se encontrara con las madres y los padres de las 243 niñas que, en agosto de 2014, se desmayaron sin explicación aparente.En ese momento, los padres de familia asociaron el malestar a los efectos de la vacuna del Virus del Papiloma Humano (VPH), pero el Gobierno y otras autoridades de salud lo declararon un caso de sugestión colectiva. Aunque cada parte ha mantenido su posición, el jefe de cartera visitó el municipio para exponer los resultados de los estudios que durante este par de años se han realizado.Podría leer: La historia detrás de las niñas que se desmayaban sin razón Su primera visita fue el pasado 14 de julio. La reunión, en la que estuvieron los padres de las menores afectadas, fue privada y tuvo lugar en la sede de la Gobernación de Bolívar. Allí, Gaviria expuso la posición del Gobierno Nacional: la vacuna contra el VPH es segura y esa afirmación la respaldan instituciones como la Organización Mundial de la Salud, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos. Una tesis que no comparten del todo los padres de familia.De ese primer encuentro salieron unos compromisos concretos para una próxima reunión, que se dio el pasado viernes 5 de agosto en Carmen de Bolívar. Ese día el jefe de cartera presentó un informe del Instituto Nacional de Salud sobre los supuestos efectos adversos de la vacuna. Un documento cuestionado por la comunidad y que, como parte de lo pactado, será revisado por tres universidades públicas del país. Pero no fue lo único que ocurrió. En medio del evento, cinco niñas, también víctimas supuestamente de la vacuna contra el VPH, se desmayaron una tras otra a la vista de todos los asistentes. Sorpresivamente algunas de ellas comenzaron a convulsionar. Aterrados algunos adultos asistentes al encuentro se levantaron a auxiliarlas y las sacaron en brazos del concurrido auditorio mientras ellas se estremecían, al parecer sin estar conscientes.El estado de salud de las pequeñas prendió las alarmas y, de inmediato, varios comenzaron a investigar que les podría haber pasado. “Estos desmayos no fueron iguales que siempre. Hay cosas que nos hace pensar que las niñas están siendo manipuladas”, dijo una alta fuente que estuvo en el evento y que no quiso revelar su nombre porque el tema se ha vuelto muy controvertido en el municipio. Un hecho que no pasó desapercibido por altas fuentes y asistentes que hablaron con Semana.com, fue la reunión previa que sostuvieron las menores con la líder de las madres, Zamira Peñalosa, minutos antes de que pasaran al frente para relatar sus casos y se desmayaran. Ese momento quedó registrado en varios videos que fueron publicados, entre otros, por Noticias Uno. El episodio llamó tanto la atención que al terminar el evento unos periodistas le preguntaron al jefe de cartera si había intereses políticos detrás de esos desmayos. Aunque el ministro no se atrevió a lanzar aseveraciones concluyentes sobre lo ocurrido, aseguró que “sí me preocupa, en general, que uno haga una manipulación política del dolor y del sufrimiento humano. Yo creo que eso no se hace”. Una fuente del departamento, que estuvo allí, aseguró que les pareció “curioso que estos desmayos se presentaran cuando es un evento público, donde hay presencia de los medios de comunicación (…) En la reunión previa, que fue a puerta cerrada, y asistieron las mismas personas, no pasó nada”. Otra persona que ha conocido los casos que se han presentado desde 2014 también manifestó su preocupación por una presunta manipulación de las menores. “Me preocupa que se aprovechen de niñas que son, sobre todo, de condiciones socioeconómicas más vulnerables. (…) Ni siquiera los padres de algunas de las menores que se desmayaron estuvieron ahí para ver lo que ocurrió. No están al tanto de lo que está pasando con ellas (…) Hay que tener cuidado con las personas que solo quieren sacar provecho de posibles y futuras indemnizaciones”, recalcó. Este portal indagó sobre el estado de salud de las cinco niñas que presentaron crisis el día de la visita del ministro y se conoció que todas estuvieron en observación un tiempo de tres horas en el Hospital Nuestra Señora del Carmen y luego fueron dadas de alta en buenas condiciones. La otra versión Semana.com se comunicó con Zamira Peñalosa, vocera de las madres de las niñas enfermas de Carmen de Bolívar, para indagar sobre los cuestionamientos. Según ella, no solo han tenido el apoyo del senador del Centro Democrático Fernando Araujo –que estuvo en el evento pasado-, sino también del senador Iván Name del Partido Verde y de la diputada del Partido Liberal en Bolívar, Verónica Payares. “No hay una posición política en específico, ni intereses políticos detrás. Lo único que están haciendo ellos es apoyar a los padres de familia de estas menores, con el único objetivo de que no se vulneren los derechos humanos”, puntualizó. Zamira también se pronunció sobre la cuestionada reunión que ella sostuvo con las menores minutos antes de que se desmayaran en el auditorio. Aseguró que, en esos segundos que hablaron, solo se pusieron de acuerdo para pedirle al ministro Gaviria que “las ayudara” a encontrar respuestas sobre lo que ocurrió y que no justificara más los desmayos “como si fuera algo psicológico”. “Los desmayos no fueron planeados. Si se hubieran organizado, ¿por qué ayer (lunes) se desmayaron otras 15 niñas? Investiguen esos casos (…) Esos rumores solo los inventan para lavarse las manos”, manifestó. Estos últimos desmayos no han sido confirmados por las autoridades de salud del municipio. ¿Un patrón? Semana.com conoció un informe técnico del Ministerio de Salud en el que hacen seguimiento a los casos de menores que han presentado este tipo de crisis relacionadas supuestamente con la vacuna del Virus del Papiloma Humano. Allí se registran las fechas en donde se han presentado este tipo de episodios. Se resalta que, curiosamente, el aumento de casos en el 2016 se dio luego de que en los medios de comunicación se reportara el fallo del Consejo de Estado a favor de la tutela interpuesta por Mónica León Del Rio, abogada de 10 de las jóvenes que se desmayaron en 2014. En el documento se afirma que estas situaciones “se normalizan llegando a los días previos a la Semana Santa, aumenta con la confirmación de la llegada de la primera etapa de la vuelta a Colombia en bicicleta, en donde el mes de mayo y principios de junio la Secretaria de Salud Departamental y municipal realizaron reuniones y actividades con presencia de padres y niñas”. Y se agrega que los casos descendieron en el periodo de vacaciones. En febrero, por ejemplo, se especifica que el aumento de los casos coincide con el inicio de clases, pero disminuye en fiestas patronales, periodos de vacaciones o fines de semana. Este patrón de comportamiento, según el informe, se viene presentando desde 2014.Los nuevos desmayos de Carmen de Bolívar parecen ser más misteriosos que los que se presentaron hace dos años. Habrá que ver si sobre estos hechos se logra determinar si existe una razón de salud o es producto de una manipulación, quien sabe con qué intereses.