El seguimiento llevado a cabo durante varios meses a una estructura delincuencial en el marco de la operación Apolo, les permitió a las autoridades en Risaralda poner tras las rejas a sus cinco presuntos integrantes; quienes serían unos auténticos expertos en el hurto de vehículos.
Desde la Alcaldía de Pereira y la Policía Metropolitana se entregaron algunos detalles sobre la manera en la cual fue desarticulado este grupo criminal, que tenía como zona de injerencia varios municipios del norte del Valle del Cauca y el Eje Cafetero.
Estas personas utilizaban controles mágicos o maestros, con los cuales escaneaban los sistemas de seguridad de los automóviles. Posteriormente, los desbloqueaban para ponerlos en marcha y así huir rápidamente del lugar.
Según se pudo conocer, esta estructura ejecutaba sus acciones en Pereira, Armenia, Cali, Dosquebradas y Cartago; donde lograron robar una importante cantidad de carros, especialmente durante las horas de la noche y la madrugada.
Los sujetos que fueron detenidos, al parecer, tenían claramente establecidas sus funciones dentro de la organización; ya que se desempeñaban como coordinadores, transportistas, haladores o receptadores.
Su modus operandi era bastante sofisticado y rápido, ya que en pocos minutos lograban llevar un vehículo fuera de la ciudad o municipio donde era hurtado, por lo que, en el momento en que sus propietarios se daban cuenta del hurto, ya era demasiado tarde.
A estos automotores inicialmente les hacían modificaciones y procedían a regrabar sus números de identificación. Además, les cambiaban las placas por las de otros carros similares para después llevar a cabo la venta en el suroeste del país; específicamente en los departamentos de Cauca, Huila y Valle del Cauca.
Durante las cuatro diligencias de registro y allanamiento se logró la captura de cinco hombres por orden judicial, mientras que otro fue detenido en flagrancia por porte ilegal de armas de fuego. Al presunto líder de la estructura delincuencial se le notificó su situación judicial, mientras se encontraba en poder de la Policía Nacional en la estación del municipio de San Pedro, Valle del Cauca.
Estos operativos también permitieron la incautación de un control negro grabado en bajo relieve, el cual es conocido como Pandora, que por su alta tecnología es muy eficaz para desbloquear los vehículos y proceder con su hurto mediante la modalidad de halado.
Igualmente, se logró el decomiso de una antena GPS bloqueadora de señal, cuatro controles para vehículos de diferentes marcas, dos llaves manuales para carro, un computador, una tablet, una memoria USB, un revólver Ruger, una pistola Magnum con 45 cartuchos, un arma de aire comprimido marca Walter, cinco teléfonos celulares y una motocicleta.
De acuerdo con el reporte que entregan las autoridades, la operación Apolo hizo posible el esclarecimiento de 32 casos de hurto a vehículos en esta zona del país; aunque las investigaciones continúan para resolver otros hechos que tendrían relación con esta peligrosa banda.
En el reporte de las autoridades se indica que el hombre detenido en flagrancia por tráfico, fabricación, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones, fue cobijado con medida de detención intramural.
Entretanto, un juez determinó que de los cinco individuos que, al parecer, conformaban este grupo criminal, tres fueran enviados a un establecimiento penitenciario y uno quedara con detención domiciliaria por los delitos de concierto para delinquir, y hurto calificado y agravado. El otro sujeto fue puesto en libertad.
Se recuerda a los propietarios de vehículos la importancia de no dejarlos abandonados en la vía pública o zonas solitarias y con poca iluminación. De igual forma se pide la colaboración de la ciudadanía marcando la Línea Única de Emergencias 123 o el celular 3143587212 cuando se observen movimientos sospechosos, ya que esta es la mejor manera de prevenir el delito.