Las condiciones deficientes de sus instalaciones, las cuales fueron comprobadas durante una visita realizada por la Superintendencia Nacional de Salud, provocaron el cierre temporal de los servicios en dos instituciones médicas de la ciudad de Pereira.

Entre las afectadas se encuentra la Corporación Médica Salud para los Colombianos, con sede en el sector de Pinares, en la que se evidenciaron irregularidades con el control de los insumos médicos y los fármacos.

Durante la visita a esta entidad se verificó que contaba con medicamentos vencidos en la sala de cirugía, los cuales podrían ser utilizados en cualquier momento para la atención de los pacientes.

Por mala salubridad en sus instalaciones la Supersalud ordenó el cierre de algunas clínicas en Pereira. (Foto de referencia) | Foto: Superintendencia de Salud

Adicionalmente, se pudo evidenciar el mal manejo de los insumos quirúrgicos, ya que no cumplían con las prácticas de esterilización adecuadas por la falta de una incubadora desde el mes de marzo, por lo que el monitoreo de indicadores biológicos no se podía realizar de forma precisa.

En la actualidad, la Corporación Médica Salud para los Colombianos, en la sede del barrio Pinares, es la encargada de prestar los servicios a los docentes del magisterio en el departamento de Risaralda.

Sobre este particular, el secretario de Salud de Risaralda, Rodolfo Antonio Burgos Pereira, explicó que se llevó a cabo el procedimiento de verificación para el cumplimiento de los requisitos de la Resolución 3100 de 2019.

Indicó que al evidenciar las deficiencias existentes acerca de los criterios de habilitación, fue necesario proceder con el cierre de los servicios de urgencias, quirófanos y hospitalización de manera temporal.

También habló del plan de contingencia, señalando que ya se brindó toda la información necesaria a las clínicas y hospitales de carácter público o privado, para que procedan con la recepción de los pacientes que son trasladados.

En Pereira dos clínicas fueron cerradas por la Superintendencia por mala salubridad en sus instalaciones. (Foto de referencia) | Foto: Superintendencia de Salud

“Se informó a las EPS y a los otros prestadores en el marco del plan de contingencia, y se dio un tiempo prudencial para hacer el traslado de estos pacientes a otras entidades que tienen la capacidad de dar la atención a la población”, aseguró.

Destacó la colaboración de la red de hospitalización frente a esta situación, a la que se sumaron IPS nuevas como la Clínica Los Nevados. Acerca de la suspensión a la Corporación Médica Salud para los Colombianos, recordó que se mantendrá vigente hasta que el prestador demuestre que cumple con todas las condiciones de habilitación.

Otra institución médica que fue cerrada temporalmente es la Clínica de Ortopedia y Traumatología Fracturas y Fracturas, una de las principales receptoras por accidentes de Soat en la ciudad de Pereira.

En la visita de la Superintendencia de Salud se pudo comprobar que a pesar de no contar con la habilitación por parte de la Secretaría de Salud de Risaralda, esta entidad seguía ofreciendo entre sus servicios la consulta prioritaria.

Tampoco quedó clara la calidad y legalidad de sus servicios, debido a las condiciones poco adecuadas de su infraestructura y el mantenimiento deficiente de las instalaciones.

Además, no se encontró una clasificación eficaz de los análisis de incidentes y eventos adversos, los cuales se pueden dar después de la utilización de algunos dispositivos médicos, mientras que varios registros de las historias clínicas no estaban completos.

Supersalud cerró temporalmente la Clínica de Ortopedia y Traumatología Fracturas y Fracturas. (Foto de referencia) | Foto: Supersalud.

En cuanto al material de osteosíntesis, que comprende los elementos para unir o fijar los fragmentos de hueso fracturados, se comprobó que no existían las tarjetas de implante por triplicado, las cuales resultan indispensables para determinar su idoneidad y trazabilidad.

La Superintendencia Nacional de Salud adelanta estos operativos de inspección, vigilancia y control en varias ciudades de Colombia, con el objetivo de comprobar cómo es la atención a las víctimas de accidentes de tránsito, para así proteger el derecho a la salud y salvaguardar los recursos públicos.