Con gran preocupación, la Defensoría del Pueblo analiza la situación de inseguridad que se vive en el municipio de Dosquebradas, Risaralda, en el que se ha podido evidenciar la presencia del grupo delincuencial denominado La Cordillera en sus 12 comunas, lo cual ha generado un aumento de las acciones violentas durante el último año afectando a toda la ciudadanía.
Desde la entidad se ha emitido la Alerta Temprana Estructural 01-2023, que informa acerca del incremento notable en las amenazas contra líderes y lideresas sociales, las desapariciones y el reclutamiento forzado de niños, niñas y adolescentes con fines de explotación sexual, en las áreas urbana y rural de esta localidad que limita con la ciudad de Pereira.
El defensor del Pueblo, Carlos Ernesto Camargo Assis, indicó que esta situación convierte al municipio en un escenario de riesgo para población civil debido a la presencia, consolidación, dominio y accionar violento de este grupo armado ilegal que es sucesor del paramilitarismo, el cual además tiene a su servicio bandas de crimen organizado que generan violaciones sistemáticas al Derecho Internacional Humanitario.
De hecho, el Sistema de Alertas Tempranas, (SAT), de la Defensoría del Pueblo, señala que el riesgo de afectación para las 176.000 personas que habitan en el área urbana y las 6.000 de la zona rural van en aumento durante los últimos 12 meses, debido a que tampoco se tiene una adecuada respuesta institucional para la prevención de los hechos delincuenciales.
”Aunque toda la situación en Dosquebradas es delicada, hacemos un especial llamado a las autoridades para prevenir que los niños, niñas y adolescentes puedan ser vinculados a La Cordillera, aprovechando los niveles de pobreza extrema y las limitaciones de acceso a la educación que hay en el municipio. Con la alerta temprana le pedimos a las autoridades que promuevan y adopten medidas urgentes de prevención y protección ante las situaciones de riesgo y amenaza de la población residente en este territorio”, afirmó.
Hizo énfasis en que desde enero de 2022 la Defensoría del Pueblo está informando acerca del accionar delincuencial de La Cordillera en el municipio de Dosquebradas, en el que hay hechos relacionados con la venta de sustancias estupefacientes en pequeñas cantidades, tránsito y distribución de armas de fuego, cobro de extorsiones o tributos ilegales a cambio de seguridad, además de una economía sumergida que se sustenta en los denominados préstamos gota a gota con tasas de usura superiores al 10 por ciento mensual.
Frente a esta dinámica que facilita el lavado de activos para el financiamiento de los grupos armados ilegales y las estructuras criminales, los más afectados son los niños, niñas, adolescentes y jóvenes; las comunidades en situación de desplazamiento, vulnerabilidad y riesgo inminente; la población víctima, sobrevivientes del conflicto armado, migrantes, mujeres, afrodescendientes, adultos mayores y en general los hombres con edades entre los 18 y los 28 años.
Precisamente la fuerte presencia de esta banda delincuencial en el municipio de Dosquebradas, Pereira y las localidades vecinas hace que algunas personas aprovechen para hacerse pasar como miembros activos de sus filas, con el objetivo de amedrentar a la comunidad y cometer crímenes que afectan su seguridad y sana convivencia.
Un ejemplo de ello es la captura por parte del GAULA de la Policía Nacional y el GAULA Militar de dos sujetos, quienes el día 27 de marzo de 2021 habrían ingresado a una finca en la vereda el Congolo de Pereira para amenazar a sus residentes con armas de fuego, a quienes ataron y amenazaron para proceder a hurtar elementos por valor de 60 millones de pesos.
Las declaraciones entregadas por las víctimas indican que estos dos individuos les dijeron durante el asalto que eran integrantes de La Cordillera, por lo que se hizo más fuerte aún la intimidación a la que fueron sometidos aquel día. Tras su detención quedaron a órdenes de la Fiscalía General de la Nación junto con otros 3 hombres que al parecer participaron en el atraco, para que respondan por los presuntos delitos de secuestro simple y hurto calificado y agravado. Se pudo conocer que uno de los capturados cuenta con antecedentes por extorsión y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.