De manera satisfactoria se recuperan las 29 personas que debieron ser trasladadas a centros hospitalarios de la ciudad de Pereira, tras la emergencia registrada sobre las 5:20 p.m. de este miércoles 8 de marzo por una fuga de gas.

Los hechos ocurrieron en las instalaciones de la antigua bodega de la empresa Haceb, localizada en la avenida 30 de Agosto a la altura de la calle 50, donde se formó una gran congestión vehicular.

El hecho se registró en la Avenida 30 de Agosto de la ciudad de Pereira | Foto: Cortesía Última Hora Pereira

El ingeniero Jorge Enrique González, quien es el subgerente técnico de la empresa Efigas, indicó que durante la verificación que se hacía a una instalación interna del lugar se produjo la fuga, a pesar de que está se encontraba suspendida.

Explicó que precisamente la liberación de esta sustancia ocasionó síntomas de intoxicación en varias personas que se encontraban en el sitio, quienes se vieron expuestas a su inhalación durante un periodo prolongado por el escape que se registró.

Agregó que los análisis posteriores permitieron determinar que la edificación ubicada en Pereira no cuenta con el servicio de gas natural, pero que una tubería de conducción había sido cortada por particulares y justamente por eso se produjo la fuga de gas, la cual fue ascendiendo por todos los pisos de la estructura.

Hizo un llamado a la ciudadanía para que permita la realización de las revisiones periódicas por parte del personal de la compañía, y para que no deje que personas ajenas a esta manipulen las instalaciones porque esto podría comprometer seriamente la seguridad de la misma.

Emergencia en Pereira, Risaralda, con instalación interna de gas natural. Foto de referencia | Foto: Getty Images

En las horas de la noche, el edificio fue recorrido por personal de Efigas, Cruz Roja, Defensa Civil y Bomberos de Pereira, que se valió de instrumentos de medición especializados para determinar que ya no existía presencia de gas en el sitio y era seguro el regreso de las personas que allí laboran, ya que actualmente en estas instalaciones funciona un call center.

Desde la Secretaría de Salud Pública de Pereira se informó que los pacientes fueron trasladados a diferentes centros asistenciales de la ciudad así:

  • Clínica Los Rosales 7.
  • E.S.E. Salud Pereira, sede San Joaquín 5.
  • Hospital San Jorge 8.
  • Clínica San Rafael Megacentro en Pinares 4.
  • E.S.E. Salud Pereira del Centro 1.
  • Clínica Confamiliar 4.

Desde la empresa Efigas se recomienda realizar el mantenimiento de los gasodomésticos al menos una vez al año y siempre por parte de personal experto. También, que no se efectúe ninguna clase de manipulación en las redes de gas natural, ni tampoco colgar objetos o cables eléctricos sobre las tuberías.

Mantener los aparatos que requieran gas para su funcionamiento en lugares debidamente ventilados y comunicarse a la línea de emergencia 164, o al 018000966344, si se detecta fuerte olor a gas o se tiene pensado efectuar alguna obra en el inmueble que comprometa las tuberías, por lo cual sería necesario realizar una suspensión temporal.

Las personas o animales que inhalen monóxido de carbono pueden intoxicarse fácilmente y experimentar síntomas como dolor de cabeza, mareo, debilidad, náuseas, vómito, confusión y dolor en el pecho.

Varias personas resultaron afectadas por la situación | Foto: Cortesía Efigas

Uno de los principales factores que provocan las complicaciones, que incluso pueden derivar en el fallecimiento de las personas, es cuando estas se duermen producto de la inhalación del monóxido de carbono.

Cuando un paciente presenta intoxicación por esta sustancia debe respirar oxígeno puro en un centro hospitalario a través de una mascarilla, para que el oxígeno alcance los órganos y tejidos.

Dependiendo del grado de intoxicación puede ser necesario acudir a la oxigenoterapia en cámara hiperbárica, en la cual la presión del aire es dos o tres veces superior a la normal para su reemplazo en la sangre. Esta se aplica en casos más graves para proteger los tejidos del corazón y cerebro que son los más vulnerables a la acción del monóxido de carbono.