Tres de los ocho colombianos que habían sido detenidos por guardas venezolanos el pasado 23 de marzo están libres, según versiones de sus familiares. Las versiones que se conocen hasta ahora dicen que Cruz Elva Giraldo y sus sobrinos Santiago e Isabel, van camino a casa. Su libertad llegó justo 45 días después de haber sido detenidos, plazo que dan las leyes venezolanas como tope para investigar a una persona y sindicarla de algún delito. Las autoridades los detuvieron en el Estado de Aragua porque tenían una cámara con fotografías que consideraron sospechosas. Las imágenes, según la versión de las autoridades venezolanas, fueron tomadas a “varias subestaciones eléctricas del país, del sistema interconectado nacional y de la infraestructura vial”. Por esos días, hubo varios cortes de energía en Venezuela. El presidente Hugo Chávez, dijo que "quién sabe cuántos de estos apagones han sido producto del sabotaje y por eso es que hemos incrementado la inteligencia, el patrullaje en todas las plantas". “Posteriormente, en un allanamiento encontraron unos documentos en los que figuran dos de los detenidos como personas que laboraban en la IV Brigada del Ejército en Medellín. Según versiones de sus familiares, los detenidos habrían trabajado en el área administrativa del dispensario de la IV Brigada, hace más de ocho años”, dijeron en su momento los guardas venezolanos. Los detenidos eran los esposos Luis Carlos Cossio y Cruz Elva Giraldo, tres sobrinos de ella: Santiago, Nelson e Isabel Giraldo y otros tres trabajadores de una empresa familiar de helados fundada hace 17 años en Barinitas.   Los liberados regresaron a Colombia junto con otros 46 colombianos que fueron deportados. Nuevos detenidos Pero la libertad de aquellos tres colombianos llegó con la detención de otros 14 en el Estado Miranda, también en Venezuela. Entre ellos se encuentran dos menores de edad, uno de 16 años y otro de 17. Según se ha conocido hasta ahora, esos colombianos estaban indocumentados y, aparentemente, estaban talando árboles, algo que se considera delito sancionado con cárcel en ese país. Supuestamente, ellos portaban armas también. El sitio exacto donde desarrollaban esta actividad es conocido como Yaguarita. El Defensor del Pueblo colombiano, Volmar Pérez Ortiz, instó a las autoridades venezolanas a que se hagan efectivas las garantías procesales de los 14 colombianos detenidos por la Guardia Nacional de Venezuela y varios Cuerpos de Seguridad en el Estado Miranda.