Un terrible asesinato en la ciudad de Valledupar llevó a que la Fiscalía General de la Nación impusiera medida de aseguramiento en contra del presunto responsable. Un hombre que al parecer, en medio de una furia desmedida atentó contra su víctima, quien le negó drogas en un barrio de invasión de la ciudad.
Se trata de Víctor Miguel Peñaloza Mercado, alias el Cacha, ante las pruebas presentadas por la Fiscalía, un juez con funciones de control de garantías, impuso medida de aseguramiento en centro carcelario como presunto responsable del asesinato de una persona en un sector de la invasión Altos de Pimenta de Valledupar, capital del departamento de Cesar.
Según la investigación, los hechos se registraron el 21 de agosto del 2016, cuando al parecer, Romero Rodríguez, habría llegado a la casa de la víctima, portando un arma de fuego, en compañía de una mujer a la que minutos antes le habrían negado venta de estupefacientes.
“Se pudo establecer, que, ante la negativa, el implicado le propinó cinco disparos en el abdomen a la víctima lo que le produjo la muerte de manera instantánea. La información suministrada por un testigo, así como el reconocimiento fotográfico, entre otros, permitieron la identificación del imputado”, indicó la Fiscalía.
Uniformados de la Policía de la Nacional materializaron su captura el pasado 8 de mayo en El Banco en el departamento del Magdalena y desde allí inició su proceso judicial, la Fiscalía le imputó cargos por su presunta responsabilidad en los delitos de homicidio agravado, fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.
En Valledupar:
En la mañana del 7 de abril fue reportado un amotinamiento en el centro de detención transitorio La Permanente, de Valledupar, tras un operativo de intervención.
Según lo que se conoce, el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) llegó al centro de detención junto a otros funcionarios de la Policía, con el objetivo de hacer una requisa a los internos que, al parecer, habían tumbado una pared para intentar escarpar.
En medio del amotinamiento, resultaron heridos 35 reclusos en circunstancias que, según las autoridades, son materia de investigación.
Inicialmente, la hipótesis que tomó más fuerza es que extorsionistas estarían liderando los altercados entre internos y policías, donde supuestamente los reclusos tenían en su poder armas blancas.
Al parecer, los internos aprovecharon los desmanes y derrumbaron parte de una pared, tomando los escombros como armas en contra de la Policía, todo para evitar que las requisas fueran efectuadas. Sin embargo, las autoridades lograron controlar la situación y allanar las celdas.
En el operativo encontraron más de 100 celulares, más de 57 armas cortopunzantes y varios kilos de cocaína, marihuana y bazuco.
“Hicieron unos huecos en la pared para tratar de darse a la fuga y de ahí sacaban piedras y ladrillos. Cuando estábamos todos afuera, empezaron a tirar piedras por todos lados y caían en las casas vecinas, partiendo techos y partiendo carros. Ellos (los extorsionistas) querían eso, a los que les dicen plumas blancas, porque no querían que ingresaran a esa cárcel”, señaló Silvio Cuello, personero de Valledupar.
Por el momento, además de los 35 hombres lesionados, fueron reportados daños materiales; debido a ello, 570 internos fueron trasladados al comando de la Policía de Cesar, mientras realizan las obras de reacondicionamiento.
Hasta ahora, 25 de los reclusos llegaron a las celdas de La Judicial y 100 más fueron llevados a un centro carcelario con mayor seguridad.