El estado de Florida en Estados Unidos, en definitiva, fue el más afectado por el paso del huracán Ian durante finales de septiembre e inicios de octubre, sin embargo, las consecuencias en la región podrían tardar mucho más de lo esperado para regresar a la completa normalidad.
Aunque se han anunciado medidas para reconstruir las zonas más afectadas, lo que directamente haría que cientos de personas que trabajen en obras lleguen a la región para ayudar con la construcción de casas y edificaciones para los residentes, hasta que esto no suceda, entonces no volvería el turismo masivo a la costa estadounidense.
A pesar de que otras noticias un poco más positivas se han evidenciado para la región, como el descenso de los precios de la vivienda, lo que podría atraer a cada vez más personas interesadas en adquirir inmuebles, así como la intención de los anteriores residentes en reconstruir sus casas y sus vidas a pesar del temor de un próximo huracán.
Sin embargo, economistas en Estados Unidos han previsto una época de desempleo tras el paso del huracán, que, incluso, ya se ha vivido en tormentas pasadas, lo que alerta a las comunidades residentes sobre aún más duros momentos económicos tras la tragedia.
“Ciertamente, va a haber algún desplazamiento a corto plazo... pero es difícil predecir exactamente cómo será en el contexto de Florida o en el sureste en general... Especialmente en las comunidades costeras, y dentro del turismo... la duración de estos efectos depende de la capacidad de reconstrucción del sector”, fueron las palabras de Lynn Karoly, quien es una economista sénior en conversación con la cadena estadounidense CNN.
Así entonces, se indicó que los efectos negativos del huracán, así como del desempleo por el huracán, serían más fuertes para las compañías pequeñas o que no cuentan con garantías como los grandes hoteles.
“El factor de resistencia podría ser menor entre la mano de obra con salarios más bajos, e incluso sus empleadores también podrían estar replanteándose cómo dotar de personal a los puestos que necesitan cubrir”, agregó la economista, indicando algunas de las alternativas que podrían tener en cuenta las empresas más locales para retomar su rentabilidad.
A pesar de los huracanes, Florida sigue atrayendo gente
Florida, conocida como el “estado soleado”, atrae a numerosos jubilados con su buen clima; y sus costas, además de ser bonitas, generan grandes ingresos económicos a través del turismo o de la pesca.
Pese a las advertencias de los expertos sobre un mayor riesgo de huracanes violentos e inundaciones por culpa del cambio climático, las costas del sureste de Estados Unidos atraen a cada vez más habitantes, lo que es considerado como una paradoja especialmente llamativa en Cabo Coral, la ciudad donde vive Kenneth Lowe.
Así entonces, entre 2010 y 2020, su población aumentó en 40.000 personas hasta casi 200.000 habitantes, según el censo estadounidense. Empero, esa localidad que fue fundada en 1958 en la península de Redfish Point, es considerada como una ciudad planificada para vender el sueño floridano.
Su trazado urbano incluye decenas de cuadras rectangulares rodeadas de canales navegables con acceso al río Caloosahatchee, que desemboca en el cercano golfo de México. El resultado es que muchos habitantes pueden tener una vivienda con vistas al agua e incluso un pequeño barco.
Antes de la construcción de esta ciudad, la zona estaba llena de pantanos y humedales que hubo que drenar. También se destruyeron manglares y corales. Un enorme cambio que creó un lugar muy vulnerable antes las inundaciones, como se pudo comprobar con el huracán Ian.
*Con información de AFP