Un comité del Senado estadounidense dio el primer paso para que Estados Unidos aporte directamente miles de millones de dólares en ayuda militar a Taiwán, reforzando su apoyo en respuesta a las crecientes tensiones con Pekín.
El Comité de Relaciones Exteriores del Senado aprobó el proyecto de Ley Política de Taiwán, para entregar 4.500 millones de dólares en ayuda militar en el transcurso de cuatro años a la isla, que por décadas ha comprado equipos a Washington.
El texto también exige al presidente estadounidense que imponga sanciones a las principales instituciones financieras chinas en respuesta a cualquier “escalada de actos hostiles hacia Taiwán”. Además, otorgaría a la isla el estatus de “aliado principal no perteneciente a la Otan”.
“Se trata de la revisión más importante de la política estadounidense hacia Taiwán” desde 1979, cuando Washington reconoció a Pekín al tiempo que acordó mantener la capacidad de autodefensa de Taiwán, dijeron los senadores Bob Menendez y Lindsey Graham, que impulsan la iniciativa.
El texto debe ser ahora aprobado en el plenario del Senado y luego en la Cámara de Representantes, antes de ser promulgado por el presidente Joe Biden.
China criticó el proyecto de ley, que entiende como una “señal equivocada” de apoyo a “las fuerzas separatistas” de Taiwán y que “vulnera el principio de una sola China”. Esta política defiende que solo existe una nación china e implica que cualquier país que quiera entablar relaciones con Pekín debe romper sus lazos diplomáticos con Taipéi.
Si el proyecto de ley sigue adelante, “sacudirá en buena medida las bases políticas de la relación entre China y Estados Unidos, y tendrá consecuencias extremadamente graves” en “la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán”, indicó a la prensa Mao Ning, portavoz del Ministerio chino de Exteriores.
La oficina de la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, expresó el jueves su “sincera gratitud” a Estados Unidos “por demostrar una vez más su amistad bipartidista y su apoyo a Taiwán”.
La iniciativa marca un importante acercamiento entre Estados Unidos y Taiwán en momentos en que las relaciones entre Pekín y Washington están en su punto más bajo en décadas. China considera a Taiwán, con una población de unos 23 millones de habitantes, como parte de su territorio y ha prometido retomarlo incluso por la fuerza si fuera necesario.
¿Nuevo orden mundial fomentado por China y Rusia?
La tensión en esa parte del mundo no cesa. En días pasados, China aseguró que quiere construir junto a Rusia un orden internacional “en una dirección más justa y racional”, según declaraciones de un alto diplomático chino antes de la reunión entre los líderes de ambos países.
Con complicadas relaciones durante la Guerra Fría, China y Rusia acercaron posturas en los últimos años actuando como contrapeso al dominio global de Estados Unidos.
“Bajo la guía estratégica del presidente Xi Jinping y del presidente (Vladimir) Putin, la relación entre los dos países siempre ha avanzado en la dirección correcta”, dijo el responsable de asuntos internacionales del Partido Comunista, Yang Jiechi, al embajador ruso en Pekín, Andréi Denisov, según un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores.
Yang dijo que China “desea trabajar con Rusia para implementar continuamente el espíritu de la cooperación estratégica de alto nivel entre los dos países, salvaguardar los intereses comunes de ambos bandos y promover el desarrollo de un orden internacional en una dirección más justa y racional”.
Con información de AFP