El Departamento de Justicia de Estados Unidos divulgó este viernes el informe con el que el FBI reclamó acceder a la mansión del expresidente Donald Trump en Mar-a-Lago (Florida), donde la agencia federal de seguridad esperaba encontrar documentos clasificados.

El documento, de 36 páginas, recoge una batería de argumentos con los que el FBI justificó la necesidad de allanar por primera vez la residencia de un expresidente de Estados Unidos. Parte del texto está oculto, según el Gobierno, para proteger a testigos citados en las pesquisas.

Según una declaración jurada del FBI publicada el viernes, catorce de las quince cajas recuperadas del patrimonio del expresidente Donald Trump en Florida a principios de este año contenían documentos clasificados, muchos de ellos de alto secreto, mezclados con diversos periódicos, revistas y correspondencia personal.

El FBI sitúa el origen de las sospechas en los documentos “altamente clasificados” descubiertos a principios de año en la vivienda de Trump por los Archivos Nacionales, responsables de custodiar material histórico. Los agentes descubrieron 184 documentos únicos y con marcas expresas de que se trataba de información secreta, 25 de ellos con el sello de top secret.

Páginas de la declaración jurada del FBI para obtener una orden de allanamiento para la propiedad Mar-a-Lago del expresidente Donald Trump, el viernes 26 de agosto de 2022. (Foto AP/Jon Elswick) | Foto: Copyright 2022 The Associated Press. All rights reserved.

Los investigadores dieron por hecho que, si registraban la mansión, encontrarían más documentos teóricamente protegidos, como finalmente ocurrió, informa NBC News. El FBI se incautó durante el registro de once lotes de materiales clasificados, lo que venía a confirmar sus sospechas.

Trump se ha apresurado a defenderse ante lo que ha descrito como “una treta total de relaciones públicas” por parte del FBI y el Departamento de Justicia. En este sentido, señaló que el texto está “muy manipulado” y ha defendido su supuesta voluntad de colaborar.

“No hice nada malo”, afirmó Trump en su perfil de Truth Social, desde donde también señaló al juez del caso, Bruce Reinhart, recriminándole que firmase la orden de registro reclamada por el FBI, según la cadena CNN.

La versión no editada de la declaración jurada explicaría en detalle lo que el departamento está investigando en relación con Trump y posiblemente revelaría algunas fuentes.

Pero el juez Bruce Reinhart aceptó los argumentos del departamento de Justicia de que había una necesidad “apremiante” de ocultar partes significativas del documento. Reinhart había ordenado la publicación de la declaración jurada editada para el mediodía del viernes, y la anticipación febril en torno a su publicación hizo que el sitio web de la corte federal colapsara.

Las autoridades judiciales se opusieron a abrir el documento, diciendo que requeriría ediciones “tan extensas como para dejar el texto abierto restante desprovisto de contenido significativo”.

Los investigadores dieron por hecho que, si registraban la mansión, encontrarían más documentos teóricamente protegidos, como finalmente ocurrió. | Foto: Getty Images

Pero el juez dijo que su liberación servía al interés público, ya que el caso involucra un allanamiento del FBI sin precedentes en la casa de un expresidente.

La orden judicial para la redada citó tres estatutos penales, incluido uno que se rige por la Ley de Espionaje, que tipifica como delito obtener o retener ilegalmente información de seguridad nacional, y otro sobre la obstrucción de una investigación federal.

Trump, que evalúa volver a presentarse como candidato presidencial en 2024, ha denunciado con vehemencia la redada del FBI.

El expresidente presentó una demanda el lunes instando a un tribunal a nombrar a una parte independiente para revisar los archivos incautados en la redada del FBI en busca de materiales protegidos por privilegio personal. Ello podría potencialmente bloquear el acceso de los investigadores a los documentos.

El expresidente no presentó su demanda ante el tribunal federal de Fort Lauderdale, Florida, que fue el que emitió la orden original, sino en el más distante Fort Pierce, cuyo único juez fue designado por él.

*Con información de la AP y AFP.