Este fin de semana, en medio de un vuelo que cubría la ruta Pittsburg - Orlando, de la aerolínea Spirit Airlines, una pasajera fue calificada como “héroe” luego de que lograra salvar a una pequeña bebé de tres meses que se estaba asfixiando.
Según relatan medios locales, se trata de una enfermera retirada identificada como Tamara Panzino, quien se encontraba justamente en el vuelo mencionado y, mientras estaban en el aire, la bebé dejó de respirar, de repente, luego del despegue, lo que generó la alerta y el pánico de la madre.
Ante la llamada de auxilio, Panzino, quien habló con el medio local Fox35 aseguró que trató de reaccionar rápidamente para salvar la vida del bebé, por lo que comenzó a hacerle masajes en el pecho y en las piernas y al poco tiempo se escuchó como la pequeña volvió a respirar.
“Cuando tienes que dar un paso adelante y hacer lo correcto, lo haces. Fue una historia feliz, y me hizo sentir muy bien”, dijo Panzino para el medio mencionado.
El meteorólogo de Fox35, Ian Cassette, estaba en el vuelo cuando todo sucedió y a través de su cuenta de Twitter comentó: “Los padres de Anjelé, de tres meses, estaban aterrorizados y nunca habían experimentado esto. Elogiaron la energía positiva del avión y las acciones heroicas de Tamara por salvarla”.
Ventana de un avión se rompió; hubo pánico entre los pasajeros
Momentos de pánico vivieron los pasajeros de un vuelo que se dirigía hacia la ciudad de Nueva York, desde Varsovia, cuando una de las ventanas del avión empezó a romperse justo cuando el avión se encontraba a pocos minutos de aterrizar en el aeropuerto internacional John F. Kennedy.
Las personas que estaban ubicadas en puestos cercanos a dicha ventana tuvieron que levantarse para alejarse del objeto, ya que les dio temor que la fricción del viento terminará de romperlo. El protocolo de seguridad tuvo que activarse de inmediato, debido a que la mayoría de los pasajeros entró en pánico al ver lo que estaba sucediendo.
The Aviation Herald reveló detalles de lo sucedido y aseguró que el avión de Polish Airlines estaba a tan solo 450 kilómetros de llegar a su destino cuando sucedió el lamentable hecho. Tras romperse el vidrio, el piloto tuvo que descender la aeronave 10 mil pies, durante 15 minutos, para continuar hacia la ciudad de New York y realizar un aterrizaje seguro.
Los protocolos de seguridad que se llevaron a cabo hicieron que el avión bajará la altitud con el fin de reducir los niveles de presión presentes en el aire. Además, en medio de este protocolo, el piloto debe planificar una desviación de emergencia por si se requería.
Tras lo sucedido, la aerolínea aclaró que se rompió el fotocroma que recubre el vidrio de la ventana, más no la cobertura o el vidrio en sí.
Los angustiosos momentos que vivieron los tripulantes fueron captados por uno de los pasajeros, quien posteriormente los compartió en su cuenta personal de Tik Tok, con el siguiente pie de foto: “Recuerdo cuando se rompió la ventana de nuestro avión en Polish Airlines y todos se asustaron”.