El detenido como sospechoso de haber matado el jueves a cinco personas en el sureste de Estados Unidos, tiene 15 años y se encuentra en estado crítico en un hospital, anunciaron este viernes las autoridades locales.

Las víctimas de los disparos en Raleigh, capital del estado de Carolina del Norte, tienen a su vez entre 16 y 52 años, precisó la jefa de la Policía local, Estella Patterson. Entre ellas figura un policía que no estaba en servicio. Sin embargo, no precisó qué tipo de arma se usó.

El sospechoso también hirió a otras dos personas: “un agente de Policía de la unidad canina que fue atendido y dado de alta del hospital” y otra persona de 59 años “todavía en estado crítico”, dijo en rueda de prensa.

La alcaldesa Mary-Ann Baldwin rechazó el acto y señaló que se trata de un “día triste y trágico. Debemos trabajar para detener esta violencia armada sin sentido en nuestro país”

“Son varias las familias de nuestra comunidad que amanecieron esta mañana sin sus seres queridos. Nos afligimos con ellos hoy. Ninguna familia debería tener que sentir este dolor”, señaló la mandataria en su cuenta en Twitter.

Y añadió que “nuestras oraciones están con ellos, los heridos y nuestros valientes oficiales de seguridad pública. Raleigh se mantiene unida”.

El adolescente abrió fuego, por un motivo que se desconoce, pasadas las 5:00 p. m. (hora local) del jueves en un paseo peatonal de esta ciudad de casi 500.000 habitantes.

“Lo vi pasar frente a mi casa, en el jardín. Tenía un rifle de caza de cañón largo y estaba vestido de camuflaje”, dijo a la cadena local WRAL un testigo que no quiso dar su apellido y se identificó como Robert.

A las 8:00 p. m., la Policía de Raleigh había indicado que rodeó a un sospechoso en una vivienda del área”. Y poco después escribió en Twitter: “El sospechoso ha sido detenido”. Se trata de un “joven hombre blanco”, precisó el teniente Jason Borneo.

Las fuerzas de seguridad se desplegaron enseguida en busca del autor del tiroteo. Se ignora cómo este consiguió el arma.

Reacciones

El presidente Joe Biden condenó este viernes este hecho y dijo que hay tanta violencia armada que algunos asesinatos ya ni siquiera son noticia.

“Basta. Hemos llorado y rezado con demasiadas familias que han tenido que soportar la terrible carga de estos tiroteos masivos”, afirmó el mandatario a través de un comunicado.

“Basta. Hemos llorado y rezado con demasiadas familias que han tenido que soportar la terrible carga de estos tiroteos masivos”, afirmó el presidente Joe Biden a través de un comunicado, al lamentar el hecho. (Photo by OLIVIER DOULIERY / AFP) | Foto: AFP or licensors

El presidente de 79 años quiere restablecer la prohibición de las armas semiautomáticas, que estuvo en vigor en Estados Unidos entre 1994 y 2004.

“El pueblo estadounidense apoya esta medida de sentido común para sacar las armas de guerra de nuestras calles. Los demócratas de la Cámara (de Representantes) ya lo aprobaron. El Senado debería hacer lo mismo”, dijo.

Sin embargo, el Congreso estadounidense no ha apostado por una legislación ambiciosa, y muchos congresistas yacen bajo la influencia de la poderosa Asociación Nacional del Rifle (NRA), el principal lobby armamentista del país.

Los únicos avances legislativos recientes siguen siendo marginales, y se han mantenido en la verificación de los antecedentes penales y psiquiátricos por encima de la compra de armas.

La oposición republicana bloquea el proyecto de ley en nombre del derecho a llevar armas garantizado por la Constitución.

“Inmenso luto”

“El terror golpeó a nuestra puerta”, lamentó el gobernador del estado, Roy Cooper, en conferencia de prensa.

El dirigente del Partido Demócrata agregó que “la pesadilla de toda población llegó a Raleigh. Es un acto de violencia sin sentido, horrible e indignante”.

Unas 49.000 personas han muerto por heridas de bala en Estados Unidos en 2021, en comparación con 45.000 en 2020, año en el que ya se había batido un récord.

Esto representa más de 130 muertes por día. Más de la mitad de ellas son suicidios.

Pero son los tiroteos con muchas víctimas los que conmocionan cada tanto al país y a la vez ilustran la brecha ideológica entre conservadores y progresistas sobre cómo prevenir este tipo de tragedias.

La historia reciente estadounidense está marcada por masacres periódicas que fomentan la idea de que ningún sitio de la vida cotidiana es seguro.

La masacre cometida en una escuela secundaria de Florida, el 14 de febrero de 2018 en Parkland, desencadenó un amplio movimiento nacional, con los jóvenes como precursores, para exigir una supervisión más estricta de las armas en Estados Unidos.

*Con información de la AFP.