El Congreso de Perú aprobó este miércoles en sesión extraordinaria una moción de censura contra el presidente Pedro Castillo por incapacidad moral, poco después de que el mandatario anunciara la disolución del parlamento y la convocatoria de nuevas elecciones legislativas.
Horas antes, Castillo anunció durante un discurso a la nación la disolución del Congreso y la convocatoria de nuevas elecciones legislativas. En consecuencia, se ha visto una cascada de dimisiones dentro de su Ejecutivo.
Entre los que han dimitido se encuentran los ministros de Trabajo, Alejandro Salas; de Educación, Rosendo Serna; y de Asuntos Exteriores, César Landa, quien acusó a Castillo de haber “violado” la Constitución cerrando el Congreso.
Estados Unidos afirmó que ya no considera al izquierdista Pedro Castillo como presidente de Perú, horas después de que intentara disolver el Congreso cuando se disponía a debatir su destitución.
“Tengo entendido que, dada la acción del Congreso, ahora es el expresidente Castillo”, dijo a los periodistas el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, y añadió que los congresistas peruanos tomaron “medidas correctivas” de acuerdo con las reglas democráticas.
“Rechazaremos categóricamente cualquier acto que contravenga (...) cualquier Constitución, cualquier acto que socave la democracia en ese país”, afirmó Price.
Estados Unidos actuará “de acuerdo con los deseos y las aspiraciones del pueblo peruano”, afirmó el portavoz.
La vicepresidenta Dina Boluarte, que denunció un “golpe de Estado”, debe asumir la Presidencia de la República.
Anteriormente, la embajadora estadounidense en Lima Lisa Kenna instó a Castillo a “revertir” la disolución del Congreso que había decretado.
“Estados Unidos insta enfáticamente al presidente Castillo a revertir su intento de cerrar el Congreso y permitir que las instituciones democráticas de Perú funcionen según la Constitución”, tuiteó la embajadora en Lima, Lisa Kenna. “Alentamos al público peruano a mantener la calma durante este tiempo incierto”, añade.
Además, Estados Unidos expresa su rechazo a cualquier atentado contra la democracia de una nación.
“Los Estados Unidos rechazan categóricamente cualquier acto extraconstitucional del presidente Castillo para impedir que el Congreso cumpla con su mandato”, señala la funcionaria.
El parlamentario peruano Edward Málaga presentó el pasado 29 de noviembre una tercera moción de censura contra el presidente Castillo, que finalmente fue aprobada este miércoles por el Congreso con 101 votos a favor de los 87 que necesitaba. De los 130 diputados solo unos pocos de Perú Libre votaron en contra, informó la emisora peruana RPP.
Tras la votación, la vicepresidenta de Perú, Dina Boluarte, asumirá la presidencia, tal y como aparece reflejado en la Constitución.
Castillo, un izquierdista, anunció la disolución del Congreso y la instauración de un gobierno de emergencia en una medida interpretada como “un golpe de Estado” por la vicepresidenta Dina Boluarte.
El anuncio de Castillo, que tiene lugar poco más de 30 años después del autogolpe del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000), desató varias dimisiones, entre ellas la del embajador de Perú ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), Harold Forsyth Mejía.
“Estamos en una ruptura, por decirlo al menos técnica, del orden constitucional, lo cual constituye naturalmente una afrenta muy grave para el proceso constitucional en el Perú, para la democracia en el Perú y para la democracia en todos los países que formamos parte de esta organización”, dijo el embajador durante una reunión del Consejo Permanente de la OEA en Washington.
La fiscal de la nación, Patricia Benavides, señaló su “rechazo de manera enfática” a “todo quebrantamiento del orden constitucional”, y exhortó al mandatario a “respetar la Constitución, el Estado de Derecho y la democracia que tanto nos ha costado”.
“El presidente Pedro Castillo ha dado un golpe de Estado. Ha violado el artículo 117 de la Constitución de Perú y ha pasado a la ilegalidad. Esto es un autogolpe”, dijo a la AFP el analista político Augusto Álvarez. Decenas de manifestantes a favor y en contra del presidente se concentraban frente al Parlamento desde antes del anuncio, a la espera del debate sobre su destitución.
*Con información de AFP y Europa Press.