Cerca de 6.000 soldados norteamericanos participan en Tailandia en los Cobra Gold, uno de los ejercicios militares más importantes de Asia con los que Washington quiere este año reafirmar su influencia en la región.
La edición número 42 de estos ejercicios, que se celebran cada año, marca el regreso a la normalidad después de las restricciones debidas a la pandemia.
Miles de soldados de Estados Unidos, Tailandia y otros países asiáticos como Singapur, Indonesia, Malasia, Corea del Sur y Japón estarán congregados allí hasta el 10 de marzo para realizar una serie de ejercicios conjuntos.
Con sus casi 6.000 integrantes, la delegación estadounidense es cuatro veces más voluminosa que hace un año, una manera de reafirmar su influencia en esta región del mundo convertida en teatro de la rivalidad con China.
“Hablamos todos lenguas diferentes, pero avanzamos con vínculos comunes, y con la idea de ir a una zona indopacífica libre y abierta”, declaró el capitán norteamericano Jonathan Coronel.
Los ejercicios de Cobra Gold incluyen lecciones de supervivencia en la jungla o la forma de atrapar serpientes.
El viernes 3 de marzo, decenas de soldados estadounidenses, tailandeses y surcoreanos ensayaron en una playa de la provincia de Chonburi (este) una operación anfibia, en la que también participaron aviones de combate.
“Son operaciones complejas. Es muy importante entrenarse juntos”, declaró a la prensa el almirante Cherngchai Chomcherngpat, comandante en jefe de la Marina tailandesa.
Las armas de Estados Unidos también llegan a territorio asiático
La influencia de Estados Unidos en Asia es tan grande que hace unos días aprobó una posible venta de armas a Taiwán por un valor de 619 millones de dólares, entre los que incluiría misiles para aviones de combate F-16, según confirmío la Agencia de Cooperación del Departamento de Defensa estadounidense.
En la nota de prensa publicada por el departamento, se explicó que el Congreso ha sido informado y se ha asegurado que Taiwán pagará la venta con sus propios fondos.
“La propuesta de venta de este equipamiento no alterará el equilibrio básico militar de la región, [...] mejorará la seguridad del receptor y asistirá en el mantenimiento de su estabilidad política, equilibrio militar y progreso económico”, aseguró el comunicado.
Entre el material, además de los citados misiles para aviones de combate F-16, figuran 100 misiles antirradiación de alta velocidad AGM-88B, 23 misiles de entrenamiento del mismo tipo o 200 misiles avanzados de medio rango tipo aire-aire, entre otras armas.
El anuncio llega en un momento de tensión entre China y Estados Unidos por la colaboración de este último con Taiwán.
El pasado mes de febrero, las autoridades de China pidieron al Gobierno estadounidense que “dejara de interferir” en asuntos relacionados con Taiwán después de que el director de la CIA, William Burns, señalara que el presidente chino Xi Jinping habría ordenado a los militares estar “preparados” para una invasión de la isla de cara a 2027.
China considera a Taiwán una provincia más bajo su soberanía. Sin embargo, Estados Unidos ha reiterado su compromiso con la defensa de la isla, lo que incluye el suministro de armas.
Con información de AFP