Los pobladores de Tampa, en el sureste de Estados Unidos, se preparaban este martes para la llegada del huracán Ian, después de que las autoridades emitieran una orden de evacuación en las zonas más vulnerables.

El Centro Nacional de Huracanes estadounidense (NHC) emitió un aviso de marea ciclónica para esta ciudad del oeste de Florida, cuya área metropolitana está construida en torno a una bahía.

Este aviso “significa que existe el peligro de inundaciones amenazantes a la vida”, indicó el NHC.

En su boletín de las 18H00 GMT, el NHC dice que se espera que el ojo de Ian, ahora con vientos sostenidos de 195 km/h, “pase al oeste de los Cayos de Florida más tarde esta noche y se acerque a la costa oeste de Florida” el miércoles.

Empleados municipales llenaban y entregaban bolsas de arena gratuitas en varios puntos de esta ciudad de casi 400.000 habitantes, donde decenas de vehículos formaban largas filas de espera.

Amanda Harrison esperó durante más de dos horas en su coche para obtener las bolsas de arena con las que proteger su casa.

“Mi esperanza es poder obtener el máximo número de bolsas. Y mi temor es que no sirvan de nada”, dijo esta mujer de 66 años.

Ricardo Castro, de su lado, decidió bajarse del coche donde esperaba su turno para ayudar a los empleados del Ayuntamiento a llenar las bolsas de arena y repartirlas.

“Mucha gente está preocupada, pero yo soy de Puerto Rico y esto es normal para nosotros”, señaló este hombre de 48 años que lleva 18 viviendo en Tampa. “Si uno se prepara, todo va a estar bien”, añadió.

Mientras, decenas de personas compraban tablones con los que proteger sus casas en una tienda de bricolage.

Chelsea Thompson se dirigió junto a su marido a la casa de sus padres St. Petersburg, al suroeste de Tampa, para ayudarlos a tapiar las puertas y las ventanas.

La vivienda está en una de las zonas de evacuación obligatoria y la familia sabe que no hay tiempo que perder.

“Cuanto más se acerca (el huracán...) la ansiedad aumenta un poco. Tapiar la casa también lo hace más real, así que estoy bastante nerviosa, pero esperando lo mejor”, dijo esta mujer de 30 años.

Sus padres se disponen a abandonar la ciudad con su perro rumbo a Orlando, mientras que ella y su marido se quedarán en su casa, situada en una zona menos vulnerable.

“Esperamos que (Ian) dé un pequeño giro, tal vez más al sur de donde estamos o más al norte, para no tener tanto impacto”, agregó.

El presidente Joe Biden instó a aquellos que están “en el área de impacto potencial” de Ian a “obedecer las instrucciones” de las autoridades.

“Los expertos dicen que este podría ser un huracán muy severo, potencialmente mortal y devastador”, por lo que su gobierno “está alerta” para “ayudar a la gente de Florida”, agregó.

La Guardia Nacional de Florida ya desplegó más de 3.200 efectivos activos y otros 1.800 en reserva para actuar en caso de necesidad, dijo el portavoz del Pentágono, Pat Ryder.

Zonas de Florida que sufrirían graves consecuencias tras su paso

Florida está en máxima alerta tras el anuncio del paso del huracán Ian por gran parte de este Estado. Las autoridades de varias ciudades, donde están incluidas Miami, Fort Lauderdale y Tampa, comenzaron a distribuir sacos de arena gratuitos entre los residentes para ayudarlos a proteger sus hogares del riesgo de inundaciones, ya que son las más propensas a recibir los fuertes vientos.

Ante la inminente llegada de Ian, el presidente Joe Biden, dispuso el estado de emergencia en Florida, lo cual permite liberar fondos de ayuda federal, mientras que el gobernador republicano del Estado, Ron DeSantis, pidió en Twitter a los residentes “tomar precauciones”.

*Con información de AFP.