Los cuadros pintados por Hunter Biden, hijo del presidente Estados Unidos, Joe Biden, fueron el miércoles 25 de enero el centro de una investigación legislativa liderada por los republicanos, que acusan a la familia del mandatario estadounidense de “comerciar con sus contactos y sus influencias”.
El jefe de un poderoso comité de la Cámara de Representantes (baja) escribió a una galería de Nueva York que exhibe las obras de arte de Hunter Biden, exigiendo que proporcione al Congreso una lista de compradores de sus piezas.
“Su acuerdo con Hunter Biden plantea serios problemas éticos y plantea la cuestión de si la familia Biden está comerciando una vez más con sus contactos e influencias”, dijo el republicano James Comer en una misiva.
También invitó al propietario de la galería, Georges Bergès, a declarar ante el Congreso el próximo mes de febrero.
Hunter Biden es uno de los objetivos predilectos del campo republicano que, al disponer de su nueva mayoría en la Cámara, ha prometido abrir una serie de investigaciones sobre el presidente demócrata.
Los republicanos apuntan en particular al riesgo de que industriales o financieros compren sus obras con el único fin de ganarse el favor de la Casa Blanca.
Según James Comer, algunas de las pinturas expuestas por la galería neoyorquina Georges Bergès costaron hasta 225 mil dólares.
“¿Quién pagaría grandes sumas por obras de Hunter Biden que, a priori, no valen nada? Ciertamente no es un Picasso”, increpó el legislador conservador en su cuenta de Twitter.
Los problemas que involucran a Hunter Biden en temas con Ucrania y China
En días pasados la comisión del Congreso envió una petición al Departamento del Tesoro pidiendo información acerca de transacciones financieras de la familia Biden que tienen a Hunter como principal sindicado de las operaciones que figuran como sospechosas de poder ser ilegales.
El problema que aqueja a Joe Biden y a Hunter, esta vez tiene que ver con el escándalo de Burisma Holdings, una empresa ucraniana de gas natural que contrató al hijo del entonces vicepresidente para que hiciera parte de su consejo administrativo, a pesar de que no tenía ninguna experiencia en el sector energético y que con el pasar de los años, ha ido levantando varias investigaciones por su actuación.
Según una investigación del Washington Post del 2020, Hunter presentó a unos de los ejecutivos de la empresa a su padre, quien tuvo una fuerte influencia en la política exterior de los Estados Unidos con Ucrania mientras fue vicepresidente de Barack Obama.
En uno de los correos filtrados, Vadym Pozharskyi, asesor de Burisma le pedía al hijo del mandatario saber si podía usar su influencia para impulsar la empresa que era acusada de lavado de dinero y que buscaba mejorar su imagen. La investigación seguirá su curso y en cuestión de semanas podría tener más pistas de lo que podría pasar para el presidente y su hijo.
Todo esto llega después de las revelaciones dadas a conocer por la nueva administración de Twitter en cabeza de Elon Musk, que mostraron que durante las elecciones presidenciales del 2020, la red social ocultó deliberadamente información sobre la investigación del Washington Post que enlodaba a Hunter Biden y a su padre, así como también se taparon los escándalos sexuales del hijo del ahora presidente.
Por ahora, el presidente Biden y su familia no pasan por el mejor de los momentos por cuenta de las actuaciones de Hunter, ‘la oveja negra’. Será cuestión de tiempo el saber que tanto puede afectar las presiones de un Congreso donde los demócratas no tienen el control absoluto y las revelaciones de un sistemático ocultamiento de la información en Twitter para beneficiar a Joe Biden, recordando que seguramente buscará la reelección en 2024.
Con información de AFP