El oficial del condado de Hillsborough, Chad Chronister, manifestó en una rueda de prensa que Jermaine Bass, le disparó a sus hijos luego de que su madre se despidiera de ellos con un beso de buenas noches.

“La madre estaba afuera cenando e hizo todo lo posible para llegar a casa antes de que sus hijos se fueran a dormir”, dijo. “Su hija de cinco años incluso se ríe porque intentaba actuar como si ya estuviera dormida. Así que besa a sus dos hijos. Los deja allí con el padre de los niños, su esposo y corre al baño”, manifestó el oficial.

De repente la mujer oyó un disparo y creyó que era en el vecindario, por lo que salió a mirar qué ocurría. Cuando su esposo salía detrás con su hijo de 8 años cargado pidiendo ayuda.

“El Departamento de Bomberos del condado de Hillsborough se apresuraron a llegar al lugar (...) Cuando llegan inicialmente a la escena, ven al padre en la sala de estar acunando al hijo de 8 años diciendo que fue un accidente”, dijo mientras relataba que el niño fue trasladado al Hospital General de Tampa.

“Al llegar al lugar de los hechos, los agentes localizaron a las dos víctimas. La víctima dos fue encontrada con heridas graves y la niña había fallecido, acostada en su cama”, puntualizan.

“Los agentes suben las escaleras solo para hacer el espantoso descubrimiento de que hay una niña de 5 años acostada en la litera superior, en un charco con su propia sangre”, dijo Chronister, asegurando que “le disparan dos o tres veces en la cabeza”.

El oficial explicó que aunque los dos niños recibieron varios impactos de bala, la menor de cinco años murió mientras su hermano se encuentra en el hospital en un estado crítico, quien “lucha por su vida”.

Las autoridades señalaron que “Jermaine Lavanda Bass ha sido acusado de asesinato en primer grado, tentativa de asesinato en primer grado y maltrato infantil con agravantes”.

La comunidad no dudó en pronunciarse a través de las redes sociales:

“No entiendo qué puede llevar a una persona a cometer un crimen tan espantoso y a un niño. Simplemente enfermizo. ¡Púdrete donde debes estar, no eres un padre y nunca lo serás!”, “Es increíble que esto ni siquiera sea una gran historia... así de insensibles nos hemos vuelto como nación”, son dos de los cientos de comentarios.

Un niño de dos años mató a su padre de un disparo en Florida

El anterior caso no es el único que se registra en los últimos meses en la Florida, cabe anotar que un niño de dos años mató a su padre por accidente. Todo ocurrió cuando el menor disparó un arma cargada que sus progenitores habían dejado sin vigilancia.

En su momento, la Policía acudió a la residencia de la víctima cerca de Orlando, en el centro de Florida, tras recibir una llamada de emergencia.

A su llegada, los agentes comprobaron que una mujer, Marie Ayala, estaba haciéndole un masaje cardíaco a su esposo, Reggie Mabry, que había recibido un disparo.

El hombre de 26 años murió poco después en el hospital, y en un primer momento la Policía pensó que se había suicidado, explicó en rueda de prensa el sheriff del condado de Orange, John Mina.

Pero el mayor de los tres niños de la pareja, un chico de cinco años, informó a los agentes que era su hermano de dos años quien había disparado a su padre por la espalda, añadió el sheriff.

El pequeño encontró la pistola en una bolsa que Mabry había dejado en el suelo y le disparó a su padre mientras este jugaba a un videojuego en un ordenador, según documentos judiciales.