El senador republicano por Florida Marco Rubio amenazó con votar en contra en el Congreso de Estados Unidos de cualquier plan de ayuda para las víctimas del huracán ‘Ian’, que ha dejado ya 87 muertos a su paso, si “lo cargan con cosas que no están relacionadas con la tormenta”.
“Creo que el plan de alivio en caso de desastres es algo con lo que no deberíamos jugar”, dijo Rubio, quien cuestionó que se utilicen este tipo de mecanismos para llevar a cabo otros fines, un argumento que ya utilizó en un primer momento para votar en contra de un paquete de ayuda por el huracán ‘Sandy’.
“Se había cargado con un montón de cosas que no tenían nada que ver con la ayuda en casos de desastre”, justificó Rubio cuando le recordaron el domingo por la noche en CNN aquel episodio. No se debería utilizar este tipo de medidas, argumentó, para “pagar todo tipo de cosas que la gente quiere”.
Las advertencias de Rubio se conocen después de que el pasado viernes, él y el también senador republicano por Florida Rick Scott solicitaron al Comité de Asignaciones del Senado el desarrollo de un plan de ayuda federal para contrarrestar los estragos dejados por ‘Ian’ a su paso.
‘Ian’, considerada ya como la peor tormenta que ha azotado al estado de Florida, alcanzó la categoría cuatro cuando tocó tierra el pasado miércoles, y debilitándose hasta convertirse en ciclón postropical el sábado, sintiéndose en forma de fuertes lluvias en varias regiones Virginia y Maryland.
Marejadas ciclónicas e intensos aguaceros dejaron barrios completos inundados mientras equipos de rescate continuaban la búsqueda de víctimas.
Luego de atravesar Florida, Ian se dirigió al Atlántico, aunque viró y volvió a tocar tierra en Carolina del Sur como huracán categoría 1, llevando copiosas lluvias y fuertes vientos también a Carolina del Norte.
La Comisión de Examinadores Médicos de Florida informó el domingo de la muerte confirmada de 58 personas como consecuencia del huracán, mientras el gobernador de Carolina del Norte dio cuenta el sábado de cuatro decesos en ese estado.
Las muertes en Florida se registraron en ocho diferentes condados, pero la cifra más elevada se produjo en el condado de Lee (42), donde se ubica la ciudad de Fort Myers así como varias islas barrera visitadas por turistas y donde residen jubilados.
La policía impide el acceso a quien no sea habitante de Fort Myers, pero un vuelo en helicóptero permite constatar la magnitud de los daños. Los vientos del huracán de categoría 4 destruyeron las numerosas casas de madera de la zona; y en algunos lugares ni siquiera se ven escombros, solamente solares vacíos donde antes había una vivienda.
Los residentes de Matlacha, que quedó aislada por tierra del resto de la península de Florida tras dañarse un puente, dijeron a la AFP que tenían dificultades para decidir sus próximos pasos.
“No tengo un plan”, dijo John Lynch, cuya casa iba hundiendo en el mar mientras se preparaba a partir.
“Estamos aquí desde hace 25 años (...) Es duro porque aquí es donde planeábamos vivir por el resto de nuestras vidas”.
El domingo, la Guardia Costera informó que suspendía la búsqueda de 16 migrantes desaparecidos luego de que su embarcación naufragara durante el paso del huracán.
Previamente, otras dos personas que estaban en la nave habían sido encontradas sin vida, mientras que otros nueve, incluyendo cuatro cubanos que nadaron hasta la orilla de los Cayos de Florida, fueron rescatados.
El presidente Joe Biden visitará el lunes Puerto Rico, afectado por el huracán Fiona hace dos semanas, antes de dirigirse el miércoles a Florida, donde evaluará la magnitud de los daños causados por Ian.
*Con información de AFP y EP.