Este miércoles, en horas de la madrugada, se dieron a conocer las pruebas contundentes que llevarían finalmente a juicio a los dos estudiantes de secundaria de Iowa que mataron a su profesora de español el año pasado como represalia por recibir una mala calificación.
Los documentos revelaron por primera vez un posible motivo en el caso desde que los adolescentes, Willard Miller y Jeremy Goodale, fueron arrestados en noviembre de 2021.
Testigos informaron haber visto la camioneta de la profesora salir del parque menos de una hora después de que ella llegara con dos hombres en el asiento delantero.
La camioneta quedó al final de un camino rural y un testigo luego recogió a los dos niños mientras caminaban hacia la ciudad por el mismo camino, dijeron los investigadores.
Además, un testigo proporcionó fotos a los investigadores de una conversación de Snapchat con Goodale que revela “las admisiones de Goodale de que actuó en concierto con otra persona para provocar la muerte de Graber”. El testigo dijo que Goodale hizo comentarios implicándose a sí mismo y también a Miller.
Ahora bien, el cuerpo de Graber fue encontrado en el parque al día siguiente debajo de una lona, en una carretilla y en traviesas de ferrocarril. Había sido golpeada hasta la muerte con un bate de béisbol, según los investigadores, y por si fuera poco, uno de los adolescentes se jactó del incidente en las redes sociales.
Al hablar con la policía, Miller confesó que estaba frustrado por los métodos de enseñanza de Graber y cómo su calificación en su clase estaba bajando su GPA.
“Se cree que la mala calificación es el motivo detrás del asesinato de Graber, que conecta directamente a Miller”, afirman los documentos judiciales presentados por el fiscal del condado de Jefferson, Chauncey Moulding, y el fiscal general adjunto de Iowa, Scott Brown esta mañana.
Miller inicialmente negó estar involucrado en la muerte de su maestra, pero luego dijo que tenía conocimiento de los hechos, pero que no participó y que un “grupo itinerante de niños enmascarados” fueron los verdaderos asesinos, quienes lo obligaron a darles su carretilla para ayudar a mover su cuerpo.
También afirmó que los presuntos niños enmascarados le hicieron conducir su camioneta desde el parque, según documentos judiciales.
Sin embargo, la abogada de Miller, Christine Branstad, afirma que cuatro órdenes de allanamiento se emitieron ilegalmente en parte porque “la policía no proporcionó información al magistrado emisor para demostrar que el informante es confiable o que la información del informante debería considerarse confiable”.
Por el momento, Branstad le está pidiendo a la corte que invalide las cuatro órdenes de allanamiento y elimine las pruebas de la casa de Miller, los comentarios que hizo a la policía y la información obtenida de su teléfono celular y Snapchat.
El juicio de Miller está programado para el próximo 20 de marzo 2023 y el juicio de Goodale está programado para el 5 de diciembre. Los adolescentes, ambos de 17 años, serán juzgados como adultos.