Una familia hispana residente en Estados Unidos vive una tragedia luego de que, en días pasados, y tras contraer una enfermedad que en comienzo parecía un simple resfriado, terminara falleciendo su hijo de 7 años.

El hecho, según recogen medios locales, ocurrió en la localidad de Oakland donde, el pasado 23 de octubre, el menor concurrió a una fiesta de disfraces en compañía de su madre; un ambiente en el que sus padres advierten que compartió, pero que, al regresar a casa, evidenciaron que él había comenzado a presentar síntomas de lo que parecía una gripa, por lo que le suministraron un medicamento y lo mandaron a dormir.

No obstante, según relataron los padres del menor, identificado como Andrew Velásquez, la situación comenzó a agravarse al día siguiente, cuando los síntomas comenzaron a hacerse más evidentes, evidenciando tos, dolor de garganta y congestión nasal; situación que no encendió mayores alarmas en los padres, quienes decidieron enviarlo como de costumbre al colegio.

Lo que para los padres era una simple gripa, realmente era otro virus, que según los médicos afecta normalmente a los menores, pero que, dadas las condiciones de Andrew, en tanto era paciente asmático, terminaron por complicarse, para llevarlo a la muerte.

En medio de la jornada del pasado lunes, durante la estadía del niño en el colegio, los maestros del niño comenzaron a evidenciar cómo la salud de él comenzaba a decaer paulatinamente en lo corrido de las clases, por lo que decidieron poner el tema en conocimiento de los padres, solicitándoles que acudieran al centro educativo para recogerlo, pues este presentaba un cuadro febril alto.

Luego de ser recogido en el colegio, los padres determinaron que el joven requería reposo, por lo que optaron por llevarlo a casa, donde la situación de salud continuó empeorando, al grado de que se vieron urgidos de llevarlo al médico, pues su temperatura no bajaba, y la dificultad para respirar aumentaba.

De acuerdo con la historia recogida por medios locales, en sus declaraciones, el padre de Andrew, un hombre identificado como Julián Vásquez, señaló que en horas de la madrugada, el niño había alcanzado una temperatura realmente alta, por lo que tuvieron que conducirlo al hospital más cercano; el Highland Hospital, en Oakland, no obstante, allí, debido a la gravedad del cuadro sintomático, decidieron posteriormente enviarlo al Children Hospital.

Tras ser internado en el hospital, y pese a los exámenes y cuidados que le realizaban el personal médico, el cuadro viral continuó avanzando, llevando a que el niño padeciera dos infartos, por lo que el nivel de complejidad de los exámenes requeridos comenzaron también a escalar.

En medio del análisis de los expertos, según recogen medios locales, la familia del menor comentó que este fue diagnosticado con metapneumovirus, por lo que les informaron que el niño debía recibir un tratamiento especial que consistía en limpiar su sangre, sacando la contaminada y haciendo una transfusión de nuevo líquido vital.

No obstante, apenas 48 horas después de haber presentado los primeros síntomas del ‘resfriado’, el menor falleció al no resistir el tratamiento

En medio de la tragedia que aqueja ahora a su familia tras la pérdida del menor, el padre del niño, Julián Vásquez, en declaraciones al medio Telemundo en Estados Unidos, elevó un llamado a los padres de familia para que puedan estar más pendientes de sus hijos, y a no minimizar los síntomas de eventuales enfermedades que pueden ser confundidos con un catarro o un resfriado común.

En declaraciones recogidas por Telemundo, el dolido padre de familia añadió que “algo que era como una simple fiebre se convirtió en una pesadilla, llevándoselo a él. Por esa razón quiero que le pongan atención a los niños, a cualquier pequeño síntoma, por más pequeño que sea. Acudan al doctor para que no sea demasiado tarde, como nos pasó a nosotros”.

Sobre el virus que llevó a la muerte a Andrew, especialistas han precisado que si bien es un virus común, puede resultar gravemente complicado en los casos en los que los pacientes presenten problemas preexistentes de tipo respiratorio o coronario, por lo que en el caso específico, el asma jugó un factor adverso determinante, en tanto ayudó a que se desarrollara una neumonía.

En ese sentido, y en tanto el virus puede estar en muchos lugares, los especialistas recomiendan el acoger como hábitos algunas de las medidas que se popularizaron en medio de la pandemia de covid, como el lavado de manos y el cuidado de las vías respiratorias en espacios muy concurridos.

Sobre el virus, los CDC han advertido que este tiene un tiempo de incubación de entre tres y seis días, además de que son los menores de cinco años los más expuestos a él.