JoAnn Oliver, una mujer residente en Georgia, Estados Unidos, es la protagonista de una historia que muchos han decidido replicar para resaltar el valor de la honestidad y la forma correcta de actuar frente a situaciones que suelen ser bastante tentadoras.

Oliver buscaba almuerzo y acudió a la famosa cadena de venta de pollo frito KFC para comprar un sándwich; sin embargo, se llevaría algo más que un emparedado.

Cuando llegó la hora de entregar el pedido, quien atendía a la mujer le entregó una bolsa en la que se suponía que iba la comida que Oliver había ordenado para su almuerzo, y allí fue cuando sucedió lo inesperado.

La hambrienta clienta metió la mano en la bolsa y no encontró comida, sino 543 dólares, unos $ 2.660.000 al cambio de este 20 de octubre en Colombia. En este momento, la duda se apoderó de la mujer, quien no sabía qué estaba sucediendo y por qué había recibido esa suma de dinero en su pedido.

Una vez lo contó y se percató de que obviamente se trataba de un error, Oliver acudió a la policía de Jackson, localidad donde hizo su pedido, para ponerla al tanto de lo sucedido y proceder con la devolución del dinero.

“Mi compañero de trabajo dice: ‘¿Qué es? ¿Qué ocurre?’. Y le di la vuelta a la bolsa para mostrársela. Y estaba llena de dinero. Ella comenzó a tomar fotografías. Así que dejé el sándwich”, dijo Oliver, según el portal de noticias NBC.

El mismo portal señala que el compañero con el que la mujer acudió al restaurante le insinuó que si con ese dinero se podrían ir de compras, a lo que ella respondió con un rotundo “no”.

Las autoridades, una vez tuvieron conocimiento de lo sucedido, resaltaron el gesto de Oliver y la forma honesta en que ella actuó ante una situación que a muchos pondría a dudar, más si se tiene en cuenta que su esposo sufrió dos derrames cerebrales y necesita cuidados especiales que implican altas sumas de dinero.

“Oliver no solo hizo lo correcto, sino que salvó el trabajo de los gerentes. ¡Sra. Oliver, gracias por recordarnos que tenemos ciudadanos increíbles en Jackson y su gente como usted que nos hace geniales!”, fueron las palabras emitidas por la Policía para reconocer el gesto de la mujer.

¿Por qué había dinero en lugar de comida en la bolsa?

La razón por la que los empleados entregaron 543 dólares a Oliver en lugar de su sándwich de pollo, no fue otra más que el desorden y la equivocación de uno de los encargados de atender la tienda.

El mánager del lugar estaba agrupando el dinero correspondiente a las ventas para hacer el depósito rutinario en una entidad encargada de recibirlo y decidió meterlo en una bolsa igual a la que se utiliza para empacar los pedidos; una vez estuvo lista la orden de Oliver, la persona que entregó el pedido confundió la bolsa y se la pasó a la cliente, quien, de inmediato, se marchó confiada que allí había solo comida.

Finalmente, el asunto no pasó a mayores y gracias a la honestidad de la mujer, los empleados del restaurante pudieron mantener su empleo y Oliver quedó con su conciencia tranquila.

La publicación en la página oficial de Facebook de la policía de Jackson obtuvo más de 500 me gusta luego de contar la historia y registrar lo sucedido.

“¡Carácter e integridad es hacer lo correcto cuando nadie está mirando!”, fue una de las frases con las que las autoridades compartieron lo sucedido en sus redes sociales.

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