Desde hace aproximadamente un mes Nueva York se está volviendo el centro de acopio de la comunidad inmigrante proveniente desde Texas. Un problema de carácter humanitario que pone en alerta al gobierno local y a diferentes entidades.

Por su parte, el alcalde de la Gran Manzana, Eric Adams, alertó que más de 8 mil inmigrantes han llegado a la ciudad desde mayo de este año y advirtió que esta cifra sería mayor como consecuencia de la llegada de buses provenientes de Texas, estado donde estas personas cruzan la frontera y son enviadas por el gobernador de allí hacia Nueva York.

Cabe destacar que hasta el momento la administración local dispuso de un total de 15 hoteles de paso, donde los inmigrantes pueden llegar, alojarse y establecerse allí mientras dan orden a su situación en este país.

Dentro de las diferentes medidas que ha tomado el alcalde Adams y su gabinete, se informó que desde la semana anterior inició su operación el Project Open Arms, un programa local que tiene como objetivo asegurar que los niños en calidad de migrantes puedan comenzar sus clases.

No obstante, otra de las ciudades que ha reportado un mayor incremento en la llegada de población migrante es Miami, la cual destacó que la llegada de embarcaciones cubanas ha aumentado significativamente en los últimos 6 meses. Dicho esto, las cifras oficiales del gobierno local indican que han llegado más de 125 mil cubanos en este periodo de tiempo, siendo este el éxodo desde la isla más grande de las décadas redientes.

Inmigrantes siguen llegando a Nueva York en autobuses enviados desde Texas

Las autoridades migratorias informaron el pasado jueves 25 de agosto que en la fecha anterior, miércoles 24, un número récord de inmigrantes llegó en la mañana a Nueva York en un total de cuatro autobuses provenientes de Texas.

De acuerdo con la información extraoficial, más de 250 personas llegaron en estos vehículos y tomaron por sorpresa a las entidades encargadas de este tipo de población, además de las fundaciones y oenegés en pro de ellos.

En este sentido, dichas entidades migratorias y defensoras de estas personas aseguran que los inmigrantes llegan a la Gran Manzana en condiciones que no son dignas y que no cumplen con un mínimo de cuidado en el transporte de esta población.

Por esta situación, la central de autobuses en Nueva York se ha convertido en un centro de atención a inmigrantes donde se les ofrece información sobre los refugios. Además, allí les brindan solución a necesidades de primer nivel y las más básicas.

Esta crisis humanitaria cumple ya varios días en la que se han visto enfrentados los gobiernos de Nueva York y Texas.

Últimos buses llegaron con inmigrantes a Nueva York

Este viernes 19 de agosto, en las primeras horas de la mañana, dos autobuses más que transportaban inmigrantes ilegales llegaron a la ciudad de Nueva York desde Texas.

Los autobuses son los más recientes enviados por el gobernador de Texas, Greg Abbott, a ciudades de izquierda como Nueva York y Washington D. C.

Abbott comenzó a enviar inmigrantes fuera de su estado, a ciudades liberales a miles de millas de la frontera entre Estados Unidos y México, como una forma de llevar evidencia de la crisis migratoria a su puerta y llamar la atención sobre el problema de la inmigración ilegal en su propio estado.

“Debido a la continua negativa del presidente Biden a reconocer la crisis causada por sus políticas de fronteras abiertas, el estado de Texas ha tenido que tomar medidas sin precedentes para mantener seguras a nuestras comunidades”, dijo Abbott el viernes.

Cabe recordar que, el miércoles 17 de agosto, cuatro nuevos buses con al menos 140 migrantes irregulares también llegaron a la Estación Central en Manhattan. Entre ellos, familias con niños y bebés.

“Claramente, Abbott está utilizando a seres humanos inocentes como arma contra Nueva York, y eso está muy mal”, manifestó el comisionado de Inmigración de la Alcaldía, Manuel Castro.

Además, el funcionario acusó al gobernador de Texas de contratar a una compañía privada de seguridad para mantener a las familias dentro de los autobuses, aunque todos habrían firmado un consentimiento para su traslado, según France 24.

Pero, ¿qué dice Abbot? El mandatario estatal admitió abiertamente que busca repartir la carga migratoria en su territorio, un estado fronterizo con México. Y alega que Nueva York y Washington D. C., por ser ciudades progresistas gobernadas por alcaldes demócratas, son las que tienen que asumir su parte en un problema que considera nacional.

Por su parte, el alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, y la alcaldesa de Washington D. C., Muriel Bowser, han criticado a Abbott por transportar en autobús a cientos de inmigrantes desde la frontera de su estado hasta sus ciudades del norte.

Adams calificó el programa de transporte de Abbott como “inhumano”, mientras que Bowser comparó la llegada de inmigrantes con una “crisis humanitaria”.