Un estudio revelado en los días recientes en la revista especializada, Environmental Science and Technology, dejó al descubierto una complicada situación que ha sido detectada por investigadores en el estado de California, Estados Unidos, en el que se ha revelado que estufas y sistemas de distribución de gas en ese territorio presentan graves problemas de fuga, que han provocado la liberación de importantes cantidades de un gas conocido como benceno, el cual podría tener efectos cancerígenos sobre la población.
De acuerdo con el estudio, además de lo delicado que resulta la liberación de dicho gas al interior de los hogares, esta fuga también podría tener consecuencias en espacios abiertos, más aún, detallando que, según las evidencias, se filtran a la atmósfera cerca de 4 toneladas de bencenos al año en esa región de Estados Unidos.
En el caso de las fugas externas, estas estarían relacionadas con averías en tuberías exteriores, que se encargan de conducir el gas a las viviendas y edificios en referido Estado.
Sobre la proporción de benceno que se está liberando a través de las tuberías, según precisaron medios locales que citan el estudio, como The Independent, este equivaldría a la contaminación provocada por cerca de 60.000 carros, en un desbalance que no es tenido en cuenta por las autoridades ambientales de ese país; Estados Unidos.
Pese a que el estudio ha permitido comprobar la existencia de peligrosas fugas de benceno, los expertos han precisado que se requieren de más precisos estudios para calcular la dimensión de la emergencia, determinado así el número de hogares que estarían afectados por las fugas.
Según precisa el estudio revelado por el medio especializado Environmental Science and Technology, para la realización de la primera parte de este, se analizaron las características y muestras recogidas en cerca de 160 hogares de diferentes regiones del Estado de California, en la que se analizó el tipo de gas que de estas es emitido en momentos en que, incluso, el electrodoméstico se encuentra apagado.
En ese sentido, los resultados arrojados por la investigación permitieron mostrar que la totalidad de las muestras recabadas contenían rastros de emisiones de gases contaminantes, advirtiendo que estos tiene efectos realmente adversos para el bienestar de los humanos, más aún en altas exposiciones a este, conocido como BTEX, haciendo referencia al Benceno, Tolueno, Etilbenceno y Xileno.
Dentro de los rastros encontrados, prendió las alarmas el hallazgo de benceno, debido a que las evidencias históricas de este gas se han asociado con sus consecuencias relacionadas con la aparición de casos de leucemia y otros tipos de cáncer, así como otras afecciones de la sangre, de acuerdo con Institutos de Salud Especializados.
Tras la presentación de las conclusiones, se espera que las autoridades locales puedan emprender las medidas necesarias para mitigar no solo las consecuencias, sino la problemática original en sí, recordando que esto también está afectando la calidad del aire, tanto en los espacios abiertos como cerrados de ese estado.
La alarma, según refieren medios locales, es mayúscula, no solo por las consecuencias, sino porque California es precisamente el segundo Estado de ese país que mayores consumos de gas domiciliario tiene.
“Esperamos que los responsables políticos tengan en cuenta estos datos a la hora de elaborar políticas para garantizar que las actuales y futuras sean protectoras de la salud a la luz de esta nueva investigación”, añadió al respecto Drew Michanowicz, coautor del estudio vinculado con el instituto de investigación PSE Healthy Energy, recordando que las muestras obtenidas en ciudades como Los Ángeles, San Francisco, Sacramento, entre otros, refieren una cantidad de gases tóxicos muy por encima de los considerados como ‘seguros’, por parte de la Oficina de Evaluación de Riesgos para la Salud Ambiental de California.