El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aseguró este domingo que la pandemia de coronavirus “se terminó”, aunque reconoció que aún hasta el día de hoy Estados Unidos “todavía tiene un problema” con el covid-19.
“La pandemia se terminó. Si te fijas, nadie lleva mascarillas. Todo el mundo parece estar en muy buena forma. Y es por esto que pienso que la situación ha cambiado”, dijo el mandatario durante una entrevista con la cadena CBS.
Por otro lado, también respecto a la pandemia, Biden señaló que los bajos índices de apoyo a su gobierno pueden estar en parte fundamentados en el impacto que ha tenido el coronavirus en la mente de los estadounidenses.
“El impacto en la mente del pueblo estadounidense como consecuencia de la pandemia es profundo. Piensa en cómo eso lo ha cambiado todo. Las actitudes de las personas sobre sí mismas, sus familias, sobre el estado de la nación, sobre el estado de sus comunidades”, dijo.
Finalmente, Biden le dio gran valor a la gestión del coronavirus llevada a cabo por su administración. “Hemos perdido un millón de personas por el covid-19. Cuando asumí el cargo, cuando fui elegido, solo dos millones de personas habían sido vacunadas. Ahora tengo 220 millones”, señaló el inquilino de la Casa Blanca.
Las autoridades sanitarias de Estados Unidos han confirmado más de 1,05 millones de fallecidos a causa del coronavirus, enfermedad de la que se contagiaron más de 95,4 millones de personas en el país.
Es el momento ideal, según la OMS
El mundo “nunca ha estado en mejor posición para acabar con la pandemia” del covid-19, que ha matado a millones de personas desde finales de 2019, afirmó la semana pasada el director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus.
“La semana pasada el número de muertes semanales por covid-19 cayó a su nivel más bajo desde marzo de 2020. Nunca hemos estado en mejor posición para acabar con la pandemia. Aún no ha terminado, pero su final está al alcance de la mano”, aseguró el doctor Tedros en una rueda de prensa.
“Alguien que corre una maratón no se detiene cuando ve la línea de meta. Corre más deprisa, con toda la energía que le queda. Y nosotros, también (...) Todos podemos ver la línea de meta, estamos a punto de ganar. Sería verdaderamente el peor momento para dejar de correr”, subrayó el máximo responsable de la OMS.
Para la autoridad de la salud, si no se aprovecha esta oportunidad, se corre el riesgo de tener más variantes, más muertos, más problemas y más incertidumbre.
Según el último informe epidemiológico publicado por la OMS y dedicado al covid-19, el número de casos descendió un 28% en la semana del 5 al 11 de septiembre respecto a la semana precedente, hasta los 3,1 millones de nuevos contagios declarados.
La cantidad de decesos retrocedió un 22% hasta menos de 11.000. El número de infecciones es, sin duda, mucho más elevado debido a que los casos poco severos no se declaran, pero también a que numerosos países han desmantelado su infraestructura para realizar tests.
En septiembre, la OMS contabilizaba más de 600 millones de casos oficialmente confirmados, una cifra que se presume muy inferior a la real, lo mismo que el número oficial de decesos: algo más de 6,4 millones de muertos en todo el mundo.
Un estudio del organismo basado en proyecciones y evaluaciones publicado en mayo sugería que podrían haberse producido entre 13 y 17 millones de muertes más de las oficiales por covid a fines de 2021.
Entre los mensajes que repite la OMS después de 2 años y con la llegada de las vacunas: vacunar al 100% de personas vulnerables y del personal sanitario, continuar con los tests a la población y mantener los programas que permiten rastrear nuevas variantes potencialmente peligrosas.
*Con información de AFP y EP.