Tras el tiroteo perpetrado el 4 de julio del año en curso, justo en medio de un evento masivo en Highland Park, ubicado en medio de una zona residencial en Chicago, Illinois, en el que el murieron 7 personas y otras 48 resultaron heridas, los sobrevivientes del hecho han comenzado la batalla legal en contra de una compañía que fabrica armas.
Según recogen medios locales, hasta la fecha ya se han registrado 11 demandas en contra de la empresa Smith & Wesson, la cual es señalada de promover el uso de armas a través de campañas de marketing en población menor de edad, lo que, según las víctimas, habría provocado que el joven de 22 años que abrió fuego en medio del evento, se viera envuelto en esa “publicidad engañosa”.
“El tiroteo masivo en el Desfile del 4 de julio de Highland Park fue el resultado previsible y completamente prevenible de una cadena de eventos iniciada por Smith & Wesson... Durante años, el fabricante ha comercializado de manera engañosa e injusta sus rifles de asalto de una manera diseñada para atraer las tendencias impulsivas y arriesgadas de los varones civiles adolescentes y postadolescentes”, afirma una de las demandas en un tribunal de Illinois, interpuestas en contra de la compañía según recoge el medio local ABC7.
Y continúa: “La misma categoría de consumidores a los que Smith & Wesson ha observado, tiempo después de un tiempo, cometa el tipo de tiroteo masivo que se desarrolló nuevamente el 4 de julio en Highland Park. Los rifles M & P de Smith & Wesson se han utilizado repetidamente en tales tiroteos masivos, incluidos los de Aurora, Colorado; San Bernardino, California; y Parkland , Florida”, argumentando el porqué culpan a la compañía por la tragedia perpetrada el día de la Independencia de Estados Unidos.
“Un ávido usuario de las plataformas de redes sociales utilizadas por Smith & Wesson para promocionar sus rifles de asalto, el tirador mostró sus fantasías violentas en línea, presentándose en una plataforma como un ‘Sargento de Artillería Maestro’ y en otras como un asesino de videojuegos. Expresó odio en línea y, a menudo, publicaba videos de sí mismo jugando juegos de disparos en primera persona”, aseveran en la demanda, haciendo referencia a Robert Crimo III, quien fue identificado como el perpetrador del tiroteo.
Crimo, fue acusado de siete cargos de asesinato en primer grado, en las audiencias en su contra confesó la masacre ejecutada el lunes 4 de julio en Highland Park. Según las declaraciones de las autoridades nunca mostró ningún tipo de emoción cuando se describió lo ocurrido ni cuando se le mencionaron los nombres de los fallecidos.
Según los fiscales, el acusado también reconoció haberse vestido de mujer y haberse maquillado para cubrir los tatuajes que tiene en la cara, y así mezclarse más fácilmente entre la multitud del evento. Durante la jornada del martes 5 de julio, el subjefe de la Oficina del alguacil de Lake, Christopher Covelli, aseguró que los primeros informes apuntan a que Crimo planeó el ataque “durante varias semanas”.
El subjefe de Policía detalló que se desconocen los motivos que impulsaron a Crimo a abrir fuego, y que no se cuenta con información para determinar si se trata de un ataque racista, por motivos religiosos u otras razones.
Originario de Highwood, una pequeña localidad cercana, Crimo fue identificado gracias a videos de vigilancia y el rastreo del arma que había comprado legalmente, informó Covelli. Fue arrestado y por el momento no ha revelado el móvil. Según el policía, el joven intentó suicidarse en abril de 2019 y estuvo bajo tratamiento médico. En septiembre de 2019, unos agentes acudieron a su casa tras ser alertados de que amenazaba con “a matar a todos”.