Las redes sociales se han convertido en una plataforma a través de las que muchos latinos recientemente han comenzado a compartir sus experiencias como migrantes en Estados Unidos, en un amplio abanico de escenarios, pues, mientras que algunos expresan satisfacción con la experiencia que están viviendo, otros advierten los retos e incluso desilusión frente al reto de convertirse en ‘dreamer’ para cumplir el sueño americano.
Una de las recientes experiencias que circulan a través de las redes sociales, fue compartida por una identificada como Maydeli Ortega, mujer de origen mexicano, quien reveló las satisfacciones que le ha llegado a representar su trabajo como mucama o camarera de hotel en Estados Unidos.
La mujer advierte en el video que las propinas hacen parte importante de las ganancias alcanzadas en su trabajo, recordando que es un dinero ‘extra’ al sueldo base que recibe por parte del hotel por sus labores arreglando las habitaciones de los huéspedes.
Sobre el particular, la mujer señala que si bien hay días en los que los huéspedes no dejan propinas, otros días puede llegar a recoger un importante rubro diario producto de la ‘gratitud monetizada’ de sus clientes.
En el video publicado a través de su cuenta oficial de TikTok, la mujer explicó que la jornada que decidió realizar el video para evidenciar su experiencia como “housekeeping”, logró recoger un monto cercano a los 25 dólares; lo que equivale a cerca de 125.000 pesos colombianos, tan solo con lo percibido en muestras de agradecimiento por parte de dos usuarios.
Así, parte importante del rubro recogido, se derivó de los 20 dólares dejados por uno de los huéspedes.
En ese mismo sentido, la mujer señaló que parte de la experiencia de desempeñarse como ‘housekeeping’, también ha derivado de las muestras de cariño ‘no monetizadas’ que recibe, refiriendo que algunos huéspedes, acompañando la propina, también han dejado notas de gratitud, las cuales, incluso muchas veces no logra entender, pues no sabe inglés aún.
En el video, Ortega destacó incluso cómo algunos huéspedes que la identifican como de origen latino, conocedores de las barreras del idioma, también se han esforzado para, en algunos casos, dejar notas en su idioma; castellano, agradeciendo su servicio.
En otros casos, según explica la mujer, algunos huéspedes le presentan notas de excusa, lamentando el estado en que ella ha tenido que encontrar la habitación.
Luego de la publicación del video, opiniones divididas se han generado por parte de los seguidores en redes sociales de la mujer, donde, mientras que algunos aplauden la posibilidad de generar dinero a través de las propinas, refiriendo que tan solo con esos 25 dólares ya representa ganancia frente a la experiencia de trabajos en los países de origen, otros internautas han señalado que si bien la joven logró mostrar una experiencia ‘positiva’ frente a la consecución de dinero extra gracias a la generosidad de los huespedes, no siempre es así.
“Trabajo en la misma compañía, pero no es que no dejen propinas, se las roban mucho los supervisores”, advierte otra de las mujeres que reacciona al video, advirtiendo que uno de los principales retos en ese trabajo está en levantar la mugre y desorden que dejan los usuarios de los hoteles.
A su turno, otros usuarios han hecho un ejercicio de mea culpa, señalando que muchas veces son conscientes del trabajo que tienen que realizar las personas que trabajan como camareras de los hoteles, pero pocas veces dejan propina.
En otro de los videos publicados por la misma mujer, ella intentó compartir algunas de las acciones básicas que debe realizar en su oficio como ‘housekeeping’, y se muestra acomodando almohadas, cambiando tendidos, lavando baños, y haciendo el aseo general de las habitaciones.
Dentro de las virtudes que afirma la mujer haber encontrado en Estados Unidos, son las tiendas de segunda mano, mostrando un amplio portafolio de productos que puede comprar allí, mostrando incluso cómo ha podido conseguir ‘ropa de marca’ a precios de ‘propina’.
Si bien la mujer se muestra conforme en su vida en Estados Unidos, otro de los videos pone en duda la afirmación, en tanto, compartiendo un paisaje marcado por las luces nocturnas de una gran metrópoli, presenta la frase “otro día más fingiendo que me gusta vivir en Estados Unidos”.
La mujer también ha empleado, con gracia, algunas situaciones para presentar uno de sus mayores retos desde que vive en Estados Unidos; el idioma.