Un reciente hecho ocurrido en los eventos que se desarrollan al margen de la Asamblea General de la ONU y la Conferencia de Reabastecimiento del Fondo Mundial, prendió las alarmas en Estados Unidos frente a la salud del presidente de ese país, Joe Biden, quien nuevamente ha sido captado por las cámaras en un caso de aparente desorientación, similar a los evidenciados ya en otros escenarios en los que el mandatario, al término de una intervención, pareciera haber ‘borrado casete’.
El video en cuestión fue captado en días pasados luego de una intervención del dirigente demócrata durante el referido evento cuando, en lugar de descender de la tarima tras abandonar el atril, camina desorientado por entarimado.
Tras la revelación del video, este ha sido difundido de manera masiva a través de las redes sociales. Mientras algunas personas manifiestan su preocupación por la salud y el estado mental del dirigente del denominado ‘país más poderoso del mundo’, otros han aprovechado el incidente para nuevamente arremeter en su contra, e incluso elevar burlas en contra del mandatario que asumió la Presidencia de EE. UU. a una edad más avanzada (actualmente tiene 79 años).
En el video se evidencia cómo, al término de su intervención, y pese a que el presentador del evento le agradece por su participación, el mandatario no logra entender que debe descender de la tarima, y camina sin guía por algunos segundos, permaneciendo después en un rincón sin saber qué hacer, y sin tampoco recibir la guía de alguna otra persona.
Según lo captado por el video, Biden luce perdido y cambiando de dirección torpemente, en un hecho que podría evidenciar algún problema de salud, pese a que en otros momentos aparenta estar muy lúcido.
El episodio pasaría a ser anecdótico, si no es porque en el pasado reciente el mandatario evidenció otros comportamientos similares durante apariciones públicas, en las que al parecer extiende la mano para saludar a personas inexistentes tras de él y otras actuaciones similares.
Según refieren medios locales, habría documentados al menos otros cuatro episodios similares que dan cuenta de que el presidente podría estar sufriendo alguna enfermedad de tipo neurológico, donde, uno de los rasgos más recurrentes es la de la llamada ‘mano fantasma’, con la que saluda a personas que no están en el lugar, evento que incluso se presentó durante un viaje a Israel.
Pese a que este tipo de hechos despiertan algún tipo de intriga en varios sectores de la opinión pública de Estados Unidos y el mundo en general, desde la Casa Blanca, sede de Gobierno de ese país, se reitera que el presidente goza de buena salud.
Durante la más reciente versión de la Conferencia de Reabastecimiento del Fondo Mundial, el encuentro versó sobre las estrategias para hacer frente a peligrosas enfermedades como el VIH/sida, la tuberculosis y la malaria, cuya presencia y daños son significativos en varios países de bajos recursos, que requieren la ayuda de los países con mayores capacidades para financiar dicha lucha.
Según precisan medios extranjeros, durante el evento, impulsado por el propio presidente Biden y que tuvo lugar el pasado miércoles, el Fondo Mundial logró recaudar la suma de 14.250 millones de dólares, en medio de una batalla que, según expertos, se retrasó en el equivalente al avance de una década, debido al ‘parón’ que representaron los años más difíciles de la pandemia de covid-19.
En su discurso, pronunciado minutos antes de lucir desubicado y dubitativo, el mandatario de Estados Unidos se manifestó para agradecer a los donantes, explicando que, gracias a sus contribuciones, se logra “dar un paso adelante, especialmente en un entorno económico global desafiante”.
En el marco del evento, Estados Unidos se comprometió a aportar 6.000 millones de dólares para la causa, acción seguida por Francia que prometió donar 1.600 millones de euros, Alemania que entregará 1.300 millones de euros, Japón 1.080 millones de dólares, Canadá 1.210 millones de dólares y la Unión Europea con 715 millones de euros.
Medios internacionales también destacaron que, desde los sectores privados, la Fundación Gates se comprometió con la donación de 912 millones de dólares para la causa descrita.