Ever Veloza García, desmovilizado de los bloques Calima y Bananero de las Autodefensas, entregó este miércoles a la Fiscalía una memoria USB que, según él, tenía Carlos Castaño Gil al momento de su muerte, informó la Fiscalía General en su sitio web. El dispositivo electrónico, según alias ‘HH' o ‘Carepollo’, contiene el testamento del desaparecido cabecilla de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), correos electrónicos a otros comandantes de bloque, correos electrónicos con códigos de seguridad y valiosa información clasificada de la Policía Nacional donde se le avisaba de antemano sobre operativos para la infiltración de las autodefensas en todo el país. La información contiene, según el informe de la Fiscalía, no sólo las fotos de los policías encubiertos, sino las cédulas y los cambios de identidad con las que debían realizar las infiltraciones. Además de la memoria digital, el cabecilla paramilitar confesó que Raúl Emilio Hasbun, alias ‘Pedro Bonito', quiso incluir en el proceso de desmovilización de las AUC a los integrantes de la Convivir Papagayo que operó en la región bananera de Antioquia, pero que Vicente Castaño Gil se opuso a esa iniciativa por considerar que era necesario conservar esa estructura armada para después de la desmovilización. Por otra parte, Veloza García controvirtió el testimonio que entregó alias ‘El Iguano', el pasado 18 de junio, donde aseguró que el secuestro de la senadora Piedad Córdoba en mayo del 99 obedeció a la información que contenían unos cassetes que le entregó José Miguel Narvaez, ex subdirector del DAS durante la era de Jorge Noguera, a Carlos Castaño (Ver Artículo). Según ‘H.H’ el plagio se ejecutó con fines políticos. Señaló alias ‘HH' que Carlos Castaño ordenó a la banda delictiva conocida como ‘La Terraza' el asesinato del periodista y humorista Jaime Garzón en agosto del 99, aunque en reiteradas ocasiones Castaño Gil reconoció que había sido un error y que el crimen se llevó a cabo para “hacerle caso a unos amigos del Ejército Nacional” Finalmente, en la diligencia judicial, Veloza dió los nombres de diez miembros de la UP asesinados en la zona bananera en 1995, que laboraban en fincas de la región.