En junio del año pasado, la Diócesis de Cúcuta creó la casa de paso La Divina Providencia, un terreno de 1.300 metros en La Parada, el barrio colombiano al que llegan todos los migrantes venezolanos que vienen de San Antonio del Táchira, Venezuela. Juan González es uno de ellos. Pero su historia es diferente: se quedó en Colombia hace tres semanas y desde entonces sirve como voluntario de esta iniciativa. “Yo no genero dinero, solo trabajo por dos platos de comida” dice. “Jamás robaría”. Desde que llegó a Colombia duerme en la calle y dedica sus días a cocinar para los miles de venezolanos que se benefician de La Divina Providencia. A diario esta casa de paso ofrece 1.500 desayunos y 1.500 almuerzos a venezolanos: los que se quedan en Colombia y aquellos que, como no tienen qué comer en su país, viajan hasta La Parada hasta ocho horas para alimentarse. No les pide nada más que su cédula para verificar que sean del vecino país.La casa -dice el padre José David Cañas, promotor de la idea- es un oasis en medio del desierto, haciendo referencia al ambiente de tranquilidad que allí se respira, muy diferente al caos que ocasionan las 45.000 personas que diariamente entran a Colombia por el puente internacional Simón Bolívar y desembocan en La Parada. El terreno mide 1.500 metros cuadrados, es descubierto y tiene varios árboles que le dan un aire distinto al del resto del barrio.En La Divina Providencia se sirve el desayuno a las 7:30 de la mañana, hora colombiana, y el almuerzo, a las 10:30, considerando que los venezolanos tienen una hora de más y que muchos de ellos madrugan para poder cruzar la frontera apenas la abren, a las 5:00 de la mañana, hora colombiana.Esta obra, que el año pasado logró repartir 210.000 almuerzos, se financia con donaciones. El lote es alquilado, cuesta 400.000 pesos al mes y, según el padre Cañas, cada almuerzo sale a 1.500 pesos. Los 50 cocineros y personas que sirven la comida y lavan la loza son voluntarios de varias congregaciones religiosas, pero también venezolanos como Juan, que se niegan a delinquir y que quieren demostrar que hay más buenos que malos dentro de los migrantes.Los aportes económicos para apoyar esta causa pueden consignarse en la cuenta de ahorros Bancolombia No. 088 657 227 20 a nombre de la Diócesis de Cúcuta, Nit. 890500597.Para las transferencias que vengan del exterior el Código Swift es COLOCOBM. En caso de que el banco solicite 11 dígitos es necesario agregar tres X: COLOCOBMXXXDiócesis de Cúcuta:diocesisdecucuta@gmail.comAvenida 1ra Nº 27-131 Barrio San Rafael - Teléfono: 5727393.