Reconocido por su solidaridad y servicio con los pobres y más necesitados, el médico y científico José Gregorio Hernández está cerca de ser beatificado. Este martes, y en medio de la crisis por el coronavirus, pandemia que estremece al mundo, el Vaticano anunció que reconoció el milagro por el que venezolano llegaría a los altares. “Con inmensa alegría en medio de esta pandemia recibimos buenas noticias”, dijo el arzobispo de Mérida y administrador Apostólico de la Arquidiócesis de Caracas, cardenal Baltazar Porras, para informar que la Santa Sede finalmente reconoció el milagro del doctor Henández, que se trató de la curación de Yaxury Solorzano, una niña de 13 años que, el 8 de marzo de 2017, recibió un disparo en su cabeza cuando unos delincuentes robaron la moto de su padre en Venezuela.
Tras el impacto de bala en su cabeza, la niña perdió no solo bastante sangre, también su masa encefálica. Horas después, fue sometida a una cirugía de alto impacto y los médicos le aseguraron a su familia que quedaría con graves secuelas el resto de su vida, como discapacidad motriz, lingüística y hasta la pérdida de su visión. No obstante, comenzaron a rezarle con mucha fe a José Gregorio Hernández, de quien su madre es devota. Con el tiempo, la menor se recuperó y volvió a tener un estado de salud perfecto. Así, el milagro se aprobó por unanimidad con el estudio hecho sobre el mismo.
Además de este, son muchos los milagros que se le atribuyen al médico venezolano por curar varias enfermedades. Especialmente en Latinoamérica, fieles católicos aseguran que han sido sanados por el doctor Hernández por medio de sueños o cuando han atravesado momentos críticos de salud como alguna operación o accidente. De hecho, el arzobispo de Mérida se refirió a que el doctor, junto con otros prominentes médicos venezolanos, “dieron lo mejor de sí en la atención a los enfermos causados por la epidemia de la gripe española que causó estragos en el mundo”. Con esto, señaló que hay que seguir su ejemplo y sus pasos en tiempos de coronavirus, para sanar a los enfermos.
“El doctor José Gregorio Hernández es un ícono de venezolanidad, más allá de las posiciones ideológicas. El mejor ejemplo de un hombre que puso toda su capacidad de científico, de servidor, para el progreso de la ciencia y la atención a los más pobres”, fueron las palabras del cardenal Baltazar Porras. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, se pronunció sobre la aprobación del milagro y aseguró que "este hecho histórico es un gran paso hacia la beatificación del médico de todos los venezolanos".