“Cuando un niño nace o una persona muere, el presente se parte por la mitad y te deja atisbar por un instante la grieta de lo verdadero”, escribió Rosa Montero.

Entre la vida y la muerte es la realidad que describe hoy la suerte de miles de niños y niñas de familias especialmente vulnerables en Colombia.

En ellos deben pensar los candidatos que desean gobernar el país. Son muchos los abismos en que puede caer el bienestar de la población infantil, como lo muestran los indicadores de hoy: la mortalidad materna incrementó entre 2019 y 2020 34,8 % y entre 2020 y 2021, 13,1 %.

El reclutamiento forzado aumentó 256 % entre 2021 y 2022 y el desplazamiento de niñas, niños y adolescentes pasó de 5.742 en 2020 a 13.265 en 2021. Su bienestar presente y su suerte futura dependen de lo que el Estado, la familia y la sociedad hagamos por ellos hoy. Por eso es de gran utilidad el esfuerzo hecho por NiñezYa, la coalición de más de 200 organizaciones de la sociedad civil que aboga por los derechos de la niñez, para hacer visibles los temas que responden a esas necesidades y que deben incluirse en la agenda presidencial.

La discusión que antecede a la elección del presidente de la República debe incluir de forma concreta la visión de los aspirantes para afrontar esta realidad. Aunque los programas de gobierno de los candidatos han tocado el tema, hacemos un llamado para que la nutrición infantil sea la prioridad de las prioridades.

En el análisis de los programas de gobierno de los candidatos se encuentra que se mencionan medidas para garantizar derechos como la salud, la nutrición y la educación inicial, pero están ausentes temas importantísimos como su derecho a la paz, a la participación y al juego. Más que enunciados de estos temas, se requiere de mayor detalle en los contenidos.

Con el mayor respeto con los dos candidatos que enfrentan la segunda vuelta, recomendamos que incluyan planes más detallados y concretos, y como ejemplo, destacamos el tema de las estrategias para la promoción de la lactancia materna.

Vale la pena recordar que esta práctica según la OMS es de importancia prioritaria en la matriz de desarrollo para una mejor educación y mayor igualdad.

Es evidente que en Colombia se ha alzado la voz de la niñez más vulnerable y existe razón en ello, ya que las necesidades de los niños están dentro de las prioridades más apremiantes y estas deben ser respaldadas en forma de fuertes políticas, proponiendo metas e indicadores financiados y alcanzables.

Ponemos a su consideración sugerencias útiles para lograrlo. Comparto las recomendaciones elaboradas por NiñezYa para ambos candidatos a la Presidencia de Colombia. https://www.fundacionexito.org/incidencia-en-politica-publica