Asustador el panorama hacia el que llevan al país. Las declaraciones del exfiscal Eduardo Montealegre, sobre buscar la reelección del inquilino de la Casa de Nariño a través de la constituyente por decreto, son maquiavélicas y repugnantes. Prácticamente, recomendó agarrar a pupitrazo limpio el Congreso, pasárselo por la faja y hacer un golpe de Estado a nuestra Constitución. Un exfiscal recomendando hacerle trampa al sistema, pasando por encima de las leyes y normas que nos rigen.

Un exfiscal, que debería ser ejemplo, recomendando acabar con el Estado de derecho y sepultar la democracia. ¿Así mismo dirigió la Fiscalía General de la Nación? Muchas cosas oscuras hay detrás de este personaje, quien es el gran enemigo de Álvaro Uribe y uno de los que está detrás del entramado que hay en su contra.

Al país hay que explicarle cómo es en realidad el proceso que se debe seguir para llegar a una constituyente, siguiendo al pie de la letra lo que rige en la Constitución para buscarla por la vía legal. El proceso para convocar una asamblea constituyente en Colombia está definido por la Constitución de 1991 y se considera un mecanismo para realizar una reforma profunda a la Constitución vigente. A continuación, el proceso:

1. Iniciativa:

- El presidente de la República: puede proponer la convocatoria a una asamblea constituyente.

- Congreso de la República: puede aprobar un acto legislativo que proponga la convocatoria.

- Ciudadanía: a través de un referendo, mediante la recolección de firmas equivalentes al 5 % del censo electoral.

2. Mediante acto legislativo:

- En el caso de que la iniciativa provenga del Congreso, se debe aprobar un acto legislativo en dos vueltas con una mayoría especial (mayoría absoluta en ambas cámaras del Congreso).

3. Referendo:

- Independientemente del origen de la iniciativa (presidente, Congreso o ciudadanía), la propuesta de convocar una asamblea constituyente debe ser sometida a referendo.

- Para que el referendo sea válido, debe tener la participación de al menos el 25 % del censo electoral y la propuesta debe ser aprobada por la mayoría de los votantes.

4. Convocatoria:

- Si el referendo es aprobado, se procede a la convocatoria de la asamblea constituyente.

- El acto de convocatoria debe definir claramente la composición, el procedimiento de elección de los miembros, las funciones específicas, los límites y el plazo de la asamblea.

5. Elección de constituyentes:

- Se realizan elecciones para elegir a los miembros de la asamblea constituyente. Los detalles del proceso electoral son establecidos en el acto de convocatoria y regulados por la autoridad electoral.

6. Funcionamiento de la asamblea:

- La asamblea constituyente se instala y comienza sus sesiones según los términos establecidos en el acto de convocatoria. Su misión principal es redactar y aprobar una nueva constitución o las reformas necesarias.

7. Aprobación de la nueva constitución:

- Una vez que la asamblea constituyente finaliza su trabajo, la nueva constitución o las reformas deben ser promulgadas según lo estipulado por la propia asamblea.

Lo que dice Montealegre no es legítimo porque busca hacer la trampa para llevar a la imposición con la excusa de que “el pueblo, a través de su poder constituyente, es quien decide las amplias transformaciones que requiere Colombia”. ¿El pueblo? ¿O los grupos armados junto con Cuba y Venezuela? Están buscando la desestabilización por la vía armada para generar esa sensación de anarquía, para lograr a como dé lugar la conmoción interior y así gobernar por decreto.

Hace menos de dos días, la senadora del Pacto Histórico Isabel Zuleta, dizque hablando a modo personal, confirmó que están buscando la reelección de su mesías porque supuestamente no lo han dejado gobernar. Buscando la reelección del peor gobierno de la historia, y el más corrupto, que está a la misma altura de Ernesto Samper y su proceso 8.000, que se la pasa de escándalo en escándalo, en que sus propios funcionarios son los que buscan a la revista SEMANA y a su directora Vicky Dávila para denunciar y destapar los actos de corrupción que cometen sus amigotes.

El caso de corrupción en la UNGRD, denunciado por Olmedo López y Sneyder Pinilla, no puede pasar desapercibido. El famoso cónclave que confirma, Olmedo en que supuestamente hay ministros, altos funcionarios del Gobierno, congresistas y directores de departamento, dio la orden de robarse 380 mil millones de pesos para –presuntamente– comprar a 30 congresistas y conseguir aprobar todas las nefastas reformas que propone este gobierno, que llevarían a Colombia hacia la cubanización. ¿Quién dio la orden? ¿Quién es el jefe de el cónclave?

Estos mismos son los que están buscando atornillar a Petro en el poder para dirigir al país hacia una dictadura comunista. A ellos no les importan los escándalos de corrupción ni las declaraciones del hijo de Petro, Nicolás Petro, de cómo –presuntamente– entraron dineros del narcotráfico a la campaña presidencial de su papá, ni la violación de topes y mucho menos sobre los 15 mil millones de pesos de los que habla Armando Benedetti en el audio con Laura Sarabia, que llevaron al triunfo del exguerrillero y que fueron repartidos en la Costa Atlántica y Pacífica. A ellos lo único que les importa es lograr el cambio de modelo económico del país, así les cueste el erario completo.

Colombia está cada día más cerca de convertirse en otra Venezuela, pero con más de 300 mil hectáreas de coca que dan para sostener la dictadura venezolana y la que quieren imponer en Colombia, protegida por los grupos narcoterroristas, que serán los guardianes leales, y sus colectivos amados para sostenerlo en el poder. Todo esto en las narices de los colombianos. No les importa el país. Solo les importa lograr, a como dé lugar, imponer la mal llamada plaga socialismo del siglo XXI. ¡Tenebroso!