Nadie está por encima de la democracia, nadie, absolutamente nadie. El pasado fin de semana, José Roberto Acosta, en su columna mostró un cuestionado, escandaloso y antiético contrato que otorgó la administración de Enrique Peñalosa a la Corporación Escuela Galán para el Desarrollo de la Democracia (CEG).  La Corporación, de carácter mixto y dirigida desde su creación hasta hoy por Maruja Pachón, la hermana de Gloria Pachón, viuda de Luis Carlos Galán, ha quedado en medio del debate, pues el contrato otorgado por Peñalosa es multimillonario y se da a menos de dos meses para las elecciones a la alcaldía de Bogotá. Horas después de la denuncia, el candidato Carlos Fernando Galán, en lugar de dar explicaciones, desvió el debate. Manifestó que José Roberto Acosta era cercano a la Fundación Pares y que esta a su vez es cercana a Claudia López, entonces por ello no debía dar explicaciones. Son dos debates diferentes, el primero son las amistades y el otro es el debate del cuestionado contrato. Comencemos por el primero. La Fundación Pares es dirigida por León Valencia y yo soy el subdirector, llevamos años destapando escándalos de corrupción, de hecho, el escándalo de parapolítica fue producto de una investigación liderada por León Valencia y Claudia López. Desde el año 2006 hemos trabajado en contra de corruptos y por mejorar la democracia. Todas estas investigaciones nos han valido intentos de atentados, hemos tenido que salir del país y las amenazas son semanales. Quien lean mi columna de Semana verá que en los últimos meses no he hecho más que destapar escándalos de corrupción. Incluso, con la captura de Kiko Gómez, ex gobernador de La Guajira que cayó preso por homicidios y relaciones con narcos, y quien militaba en Cambio Radical, mismo partido en el que militó por años Carlos Fernando Galán, debí salir del país por un buen tiempo.   Claudia López fue mi compañera de trabajo y eso es de público conocimiento. Nadie lo ha negado. La diferencia entre mis amistades y las de Carlos Fernando Galán por ejemplo con políticos de Cambio Radical es que si Pares hiciera algo no ético Claudia López seguramente nos denunciaría públicamente y a la inversa.  Esa no es la historia de Carlos Fernando Galán en Cambio Radical, quien renunció al partido apenas el año pasado, cuando el barco se hundió. El segundo tema es el contrato. Vean el siguiente cuadro, donde se muestra desde el año 2004 la contratación de la Corporación Escuela Galán con el Distrito. Nótese, como en promedio, antes de Peñalosa, apenas la contratación anual llegaba a los 100 millones de pesos. Luego como se ve, se les da un contrato por más de 10 mil millones de pesos a falta de dos meses para las elecciones. Cuadro n°1. Contratación del Distrito Capital con la Corporación Escuela Galán. Alcaldía Año Recursos contratos del Distrito. Total, millones de pesos Lucho Garzón 2004  $                -   Lucho Garzón 2005  $                -   Lucho Garzón 2006  $                -   Lucho Garzón 2007  $                -   Samuel Moreno 2008  $                -   Samuel Moreno 2009  $                -   Samuel Moreno 2010  $                96 Samuel Moreno 2011  $              121 Gustavo Petro 2012  $              150 Gustavo Petro 2013  $              174 Gustavo Petro 2014  $                -   Gustavo Petro 2015  $                -   Enrique Peñalosa 2016  $                50 Enrique Peñalosa 2017  $              610 Enrique Peñalosa 2018  $              818 Enrique Peñalosa 2019  $         10.921   Total  $ 12.940   ¿Por qué ocurre esto? Sencillamente porque Carlos Fernando Galán a nombre de Cambio Radical fue jefe de debate de Peñalosa para la alcaldía de Bogotá en 2015. Ahora, véase en el siguiente cuadro la contratación con la Nación. En la era Uribe su contratación fue mínima y en la era Santos creció vertiginosamente. Cuadro n° 2. Recursos contratados con la nación y el distrito por contratación directa y licitación. Escuela Galán Año Recursos contratos de la Nación Recursos contratos del Distrito Total en millones de pesos contratación Escuela Galán 2004  $               2.971  $                       -    $                         2.971 2005  $               2.303  $                       -    $                         2.303 2006  $               2.907  $                       -    $                         2.907 2007  $               2.995  $                       -    $                         2.995 2008  $               7.214  $                       -    $                         7.214 2009  $               7.630  $                       -    $                         7.630 2010  $                  963  $                      96  $                         1.059 2011  $             12.861  $                    121  $                       12.982 2012  $             54.740  $                    150  $                       54.890 2013  $             58.285  $                    174  $                       58.459 2014  $             15.879  $                       -    $                       15.879 2015  $             17.914  $                       -    $                       17.914 2016  $             70.117  $                      50  $                       70.167 2017  $             55.401  $                    610  $                       56.011 2018  $             66.945  $                    818  $                       67.763 2019  $ -       $               10.921  $                       10.921 Totales  $ 379.125  $    12.940  $          392.065   ¿Por qué ocurre esto? Sencillamente porque, tanto Juan Manuel Galán y Carlos Fernando Galán, desde distintos partidos, fueron aliados fundamentales en los dos mandatos del presidente Santos. La primera conclusión es que los niveles de contratación de la Corporación Escuela Galán están ligados directamente al éxito de las alianzas políticas del apellido. Allí, donde sus alianzas han resultado ganadoras tiene muchos y grandes contratos (Santos y Peñalosa), allí donde no tiene éxito quedan sin contratos. (Uribe, Petro o Lucho Garzón). Cualquier persona ve una correlación impresionante. El otro tema del contrato es el monto, los tiempos y la experiencia.  Pero antes de entrar en materia vean en siguiente video. La idea es que se entienda la relación entre el hoy candidato y el actual alcalde.  

El contrato fue suscrito con Transmilenio en agosto de este año, después de iniciar la ley de garantías y una vez surtido el proceso licitatorio que lo permitía, por un valor $10.921 millones de pesos. Este contrato busca “Implementar los componentes de Pedagogía y Mediación Social dirigidos a los usuarios, actores del Sistema TransMilenio y a las comunidades priorizadas, con el fin de reducir la problemática de evasión, y mejorar la convivencia y la seguridad en el Sistema de Transporte Masivo gestionado por TRANSMILENIO S.A. – TMSA”. Palabras más palabras menos, lo que se le encomendó a la Escuela Galán es la formación de los infractores, quienes para evitar las multas por cometer ilícitos menores en Transmilenio, como colarse al sistema sin pagar, deben recibir Talleres Pedagógicos de Código Nacional de Policía y Convivencia a cambio de evitar las multas tipo 1 y 2. Según el contrato, este se ejecutará en un periodo de seis meses (el contrato es por siete meses, pero el primero es de acondicionamiento). Conclusión: se hace un contrato con una entidad que lleva el mismo apellido que un candidato, dirigida por un familiar del candidato, utilizan el mismo color en campaña (rojo) y contrató más de 400 personas. Por si fuera poco, se hizo en tiempos de ley de garantías y con Transmilenio, que no tiene dinero ni para arreglar las puertas de las estaciones. Por si fuera poco, la Corporación Escuela Galán inicialmente no llenó los requisitos para la contratación, pero los subsanó días después, es decir, inicialmente no pasó. Cabe resaltar que, como lo señaló uno de los competidores, la propuesta del consorcio en el que participa la Escuela Galán tenía un presupuesto superior en algunos ítems a los del estudio de mercado, que deben servir como base para la evaluación, pero que, sin embargo, para Transmilenio no fue importante. Este contrato es un escándalo, es una falta ética y sobre todo atenta contra la democracia. Ya que causa una asimetría en la competencia electoral. Yo por mi parte seguiré denunciando y les pido que lean las columnas de acuerdo con las evidencias e información. Ese es el periodismo que vale.