Esta semana se conoció el documento que fue entregado por Nicolás Petro a la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes. En este, Petro Jr. reconoció que el empresario Euclides Torres financió el famoso evento de la P en la ciudad de Barranquilla, celebrado el 10 de septiembre de 2021, antes de que se iniciara de manera oficial el calendario electoral de la campaña presidencial de 2022.
En el documento, el testimonio del imputado Nicolás Petro por los delitos de enriquecimiento ilícito y lavado de activos, se señala que “Nosotros organizamos tres eventos. El primero fue la famosa P de Barranquilla, el 10 de septiembre de 2021. Organizamos uno en Cartagena, creo que en octubre de 2021, al lado de la playa, que también se hizo una P con canoas en el mar. El otro fue en Sucre, en San Benito Abad. Ese fue también en octubre”.
Además, admitió que Euclides Torres ayudó en el evento de Barranquilla para la tarima y el sonido, y lo más importante: “Para los eventos antes de la campaña”. Es decir, para lo que desde este espacio hemos denominado, desde hace varios meses, eventos de “precampaña” o de “no campaña”.
¿En Colombia se puede hacer campaña política, cualquiera que ella sea, antes de lo que establece la ley electoral? No. Los precandidatos obviamente se pueden reunir con ciudadanos en la libertad de asociación que establece la Constitución Política, pero una cosa son reuniones pequeñas y espontáneas, y otra bien distinta son los multitudinarios eventos como el de Barranquilla, al que asistieron 15.000 personas.
Al respecto, el propio presidente Petro en octubre de 2023 reconoció que Euclides Torres había financiado el evento de la P y dijo sobre el evento de la plaza de la Paz en la ciudad de Barranquilla que: “En el interrogatorio a mi hijo se habla de la financiación de un acto, al parecer, por el empresario Euclides Torres, que se realiza cinco meses antes de comenzar mi campaña, es decir, que no está cobijado por la ley electoral de campañas” y que “ante tamaño error del interrogador de la Fiscalía, el fiscal general compulsa copias a la Comisión de Acusación de la Cámara sobre un hecho que no es para nada irregular: una reunión política, que es un derecho, y que no perteneció a la campaña sencillamente porque se realizó cinco meses antes”.
Pues no fue una reunión, fueron 13 y ahora, según la información entregada por el imputado Nicolás Petro, habrían sido 14 manifestaciones incluyendo la de San Benito Abad, Sucre, las que fueron realizadas cinco meses antes de que se iniciara el calendario oficial de la campaña presidencial, es decir, el 29 de enero de 2022.
Gustavo Petro, que tanto pontifica sobre la ética, la transparencia y la verdad, no le pareció que hacer 14 eventos en los que asistieron miles de personas, que requerían financiamiento y con el claro objetivo de promover su candidatura presidencial, ¿era pasarse la ley por la faja?
Recordemos de nuevo los lugares, ciudades y fechas donde se realizaron los otros encuentros multitudinarios de “no campaña”: el 16/9/2021 en la plaza Alfonso López, en Valledupar; el 24/9/2021 en la plaza San Francisco, en Popayán; el 25/9/2021 en Pasto; el 2/10/2021 en la plaza de Lourdes, en Bogotá; el 9/10/2021 en el parque Olaya Herrera, en Pereira; el 21/10/2021 en La Boquilla, en Cartagena (reconocido ahora por Nicolás); el 11/11/2021 en Cúcuta; el 18/11/2021 en Pitalito; el 14/1/2022 en Bello; el 15/1/2022 en La Estrella; el 16/1/2022 en el parque Los Libertadores, en Villavicencio, y el 23/1/2022 en Caldono, Cauca.
Fueron 14 eventos de “precampaña” de los que se desconoce la fuente de financiación porque la ley, en efecto, no establece la obligación de entregar reportes contables a reuniones antes de la campaña oficial, porque simplemente se asume que los precandidatos no hacen eventos de campaña fuera de campaña. Si no fue eso, ¿entonces que fueron todos esos eventos?
Pero ahora se confirma que, en efecto, Euclides Torres habría financiado al menos la tarima de la P y el sonido en Barranquilla. Entonces la pregunta que sigue sobre la mesa es: ¿quién puso la plata para los otros 13 eventos multitudinarios? ¿Por qué Gustavo Petro accedió a hacer esos eventos sabiendo que eran eventos de campaña presidencial en un tiempo en el que la ley no permite que se haga la campaña como él la hizo? ¿Lo llevaron a la fuerza a dar los respectivos discursos?
¿Por qué los magistrados del Consejo Nacional Electoral no han realizado las investigaciones sobre estos 14 eventos de “no campaña”? ¿Van a hacer algo, o definitivamente en Colombia el que grite más duro, matonee y rete a las instituciones y la ley puede hacer lo que se le plazca sin consecuencias?
Y mientras todo esto ocurre, se conoció al final de la semana, según información de La Silla Vacía, que el cuestionado empresario Euclides Torres ya completa 180.000 millones de pesos en contratos con el Gobierno del “cambio”. Lo que demuestra que financiar campañas “no campañas” ¡sí paga!