En un nuevo video, la directora de SEMANA, Vicky Dávila, lanza una advertencia sobre lo que está pasando en Colombia. “Solo tenemos un país. Los colombianos no tenemos más adonde ir. Lo tenemos que reconstruir. Tenemos que recuperar la esperanza y generar confianza. Este no es el país de los cacaos o de los banqueros, de los politiqueros, de la prensa sumisa... por la conveniencia de unos cuantos, no podemos perder lo poco que tenemos”, asegura.

La periodista habla de a lo que debe apuntar el verdadero capitalismo. Un sistema que permita oportunidades y que esté lleno de empresas pujantes y competitivas, con una fuerza laboral muy bien motivada y muy bien remunerada. “Colombia no puede ser el país de los mismos ricos de siempre”, dice.

“Los lobistas que se la pasan de almuerzo en almuerzo en los pasillos del Congreso, defendiendo los intereses de los más poderosos, deben quedarse sin trabajo. No más los intereses particulares por encima”, agrega.

Dávila pone ejemplos del día a día: quienes no pagan sus créditos hipotecarios, pierden su casa. Pero los poderosos y empresarios amigos de los políticos nunca pierden. Cuando se equivocan, el Estado paga, porque siempre aparece un otrosí. Por eso, asegura que hay quitarles la plata a los políticos y devolvérsela a la gente, para que haya menos impuestos, menos burocracia, menos regulación y más oportunidades.

“El Gobierno Petro está ganando tiempo. Ya reconoció ante los banqueros que el gasto público está desbordado. Y que tiene que recortar entre 20 y 40 billones de pesos de presupuesto. Sabe que el efecto de una reducción en la demanda agregada de esa magnitud nos llevaría a una recesión. Dudo que el Gobierno asuma ese costo político. Sería aceptar una derrota en su gobierno de izquierda. Pienso que es un discurso para calmar los mercados y para que los gurús técnicos aplaudan”, sostiene.

Asegura que lo que hay detrás es lograr un margen de maniobra para dar el siguiente paso: las inversiones forzosas para los bancos. “Una propuesta que es buena para la galería, mala para la estabilidad financiera del país. Inviable. Pésima para la banca. Un retroceso muy peligroso”, advierte.

Dávila explica que lo que esto significa es tomar los ahorros de los colombianos y usarlos como caja menor. Y recuerda lo que ha pasado con la salud y lo que se ha hablado que puede pasar con las pensiones.

El futuro que asegura la directora de SEMANA que puede venir es el siguiente: un país con control de precios, intervención del Estado y deudas. Algo similar a lo que pasó en Argentina, con el llamado corralito.

Lo que puede estar esperando el Gobierno Petro, según Dávila, es tener el control sobre el Banco de la República y sobre la Corte Constitucional, que por años han sido un contrapoder al Ejecutivo.

¿Qué podemos hacer?, cuenta Dávila que le suelen preguntar a diario.

“Nos queda el poder de los colombianos de a pie, de quienes creemos en el futuro, que en todo caso, somos muchos más”, finaliza.