Como directora del Dane, a menudo me preguntan por qué cambiamos nuestras encuestas. “¿No deberían ser siempre iguales?”, me dicen. Esta inquietud es válida y merece una reflexión amplia, sobre todo a la luz de recientes comentarios de líderes de opinión que no reflejan por completo la realidad de nuestro trabajo.
Imaginen por un momento a Colombia hace 20 años. ¿Usábamos los mismos celulares?, ¿teníamos las mismas preocupaciones? Es claro que no. Nuestro país ha cambiado y con él, las preguntas que necesitamos hacer para entenderlo.
La Encuesta Nacional de Calidad de Vida (ECV) es un ejemplo perfecto. Esta herramienta, crucial para medir el bienestar de los colombianos, no puede quedarse estática en un mundo dinámico. Por eso, se evaluó junto a usuarios principales.
En nuestra última revisión de la ECV 2023, enfrentamos varios desafíos. El formulario se había vuelto demasiado extenso, lo que imponía una carga significativa a los encuestados. Algunas preguntas mostraban bajísimas tasas de respuesta. Otras podrían obtenerse con mayor precisión a través de otras Encuestas de Hogares del mismo Dane. Frente a esto, consideramos eliminar algunas preguntas o aplicarlas cada dos años. Nuestro objetivo es optimizar las encuestas sin comprometer su calidad.
Contrario a lo que se ha sugerido en algunos medios, no hemos eliminado preguntas de gasto en salud Ocde. Las consultas sobre medicamentos, servicios de salud y embarazo siguen ahí. En concreto, las preguntas sobre formulación y entrega de medicamentos se mantuvieron en el Capítulo de Salud (preguntas 30 a 32) del cuestionario de la ECV 2023. El cuestionario de la ECV 2023 está disponible para consulta pública desde finales de 2023 y los resultados se pueden verificar en los microdatos publicados en abril de 2024.
Los ajustes que realizamos son parte de nuestro compromiso con la excelencia. Por ejemplo, algunos ítems sobre productos de botiquín se reevaluaron. Estos representan apenas el 3 % del total de gastos de bolsillo en salud. Nuestra meta es captar información con mayor precisión, no ocultarla. Por eso, estos ítems están de vuelta en el cuestionario de la ECV de 2024, con un diseño mejorado para obtener datos más exactos.
Entiendo las preocupaciones expresadas por voces respetadas, como la de un exministro de Salud. En un país donde la información ha sido un bien escaso, cualquier cambio puede generar suspicacias. Pero les aseguro: nuestra única prioridad son los datos y la verdad que revelan, no una agenda política, que no tendría presentación.
El Dane no trabaja aislado. Colaboramos con expertos nacionales e internacionales. Nos adherimos a los Principios Fundamentales de las Estadísticas Oficiales de las Naciones Unidas, de la Oficina de Estadísticas de la Unión Europea (Eurostat) y del Fondo Monetario Internacional (FMI). En 2023, yo misma trabajé para la aprobación y sanción de la Ley 2335 de 2023 (Ley de estadísticas). Esta norma nos exige mantener y acoger las metodologías idóneas y más actualizadas, de acuerdo con lineamientos, buenas prácticas y estándares internacionales.
La producción de estadísticas de calidad requiere constante actualización. Cada encuesta, incluida la ECV, debe adaptarse a los cambios sociales que describe. Por eso, nuestro trabajo se somete a rigurosa evaluación y mejora continua, con métodos abiertos al escrutinio de expertos, comités técnicos externos y retroalimentación de usuarios y académicos. Valoramos la crítica constructiva, pero es crucial distinguir entre opiniones informadas y aquellas sin base técnica. En un mundo donde la desinformación se propaga con rapidez, el Dane sigue siendo un pilar de datos confiables.
La estadística es la ciencia más humilde que conozco: reconoce que no existe la perfección, de allí el “término del error”. Por eso, sus metodologías presentan el balance de beneficios y desventajas. Además, las oficinas de estadística nacionales como el Dane publicamos nuestras metodologías de manera abierta ya también hace décadas, para que todo tipo de usuario pueda consultarlas.
Nuestro objetivo es fomentar un debate público informado y responsable, que fortalezca aún más nuestro robusto sistema estadístico. Invitamos a la sociedad a trabajar juntos para que el Dane continúe siendo un referente de excelencia estadística al servicio de todos los colombianos. Más en este año especial: realizamos el Censo Económico Nacional Urbano después de tres décadas y seremos anfitriones del V Foro Mundial de Datos de Naciones Unidas, por primera vez en América Latina.