Ante el escándalo que mantiene en jaque al fiscal general, Néstor Humberto Martínez, la risible Comisión de Acusación de la Cámara decidió reabrir los procesos –que diligentemente le había archivado– y atender nuevas denuncias que dos grupos de veedurías ciudadanas interpusieron contra él. Por un extraño azar, el caso le tocó en suerte a un congresista que ostenta el curioso palmarés de ser hijo de padre delincuente, hijo de madre delincuente y jefe de un exparlamentario que le pedía a Saludcoop que consignara, mientras tramitaba una ley vital para esa empresa. El afortunado se llama Óscar Villamizar Meneses, es representante a la Cámara por Santander y miembro del partido Centro Democrático. En su casa paterna nació el escándalo de Agro Ingreso Seguro y se encontraron las primeras pruebas de la entrega de notarías a congresistas que vendieron su voto para reformar la Constitución y así permitir la reelección del entonces presidente Álvaro Uribe. Haga clic aquí para continuar leyendo la columna "El investigador".