El pasado viernes se conoció una propuesta de Santiago Castro, presidente de la Asociación de Instituciones Bancarias y Financieras (Asobancaria) en la que, a título de excongresista, pedía que para darle un empujón a la inclusión financiera se elimine el Gravamen a los Movimientos Financieros -mejor conocido como 4x1.000- de las transacciones bancarias y se le imponga a los pagos en efectivo.Castro señaló: “creo que el tema del GMF, sobre el que tanto hemos insistido que es antitécnico que ya todo el mundo lo sabe y lo acepta pero no tienen cómo reemplazarlo. Entonces estamos proponiendo ‘cámbienlo a un gravamen a las operaciones en efectivo’, incluso si tienen que ponerlo a una tasa mayor”.La lógica del dirigente gremial es que si los colombianos notan que es más costoso pagar con efectivo que con tarjetas débito o crédito, e incluso vía internet, harán mayor uso de sus productos bancarios o acudirán a la entidad financiera de su preferencia para pedir la apertura de cuentas de ahorro o crédito.Recomendado: El 79,9% de los adultos tiene al menos un producto financiero en ColombiaAquí puede escuchar la propuesta de Castro:

Como era de esperarse, la propuesta de Castro tuvo diversas respuestas entre las que se cuentan la del senador David Barguil, quien dijo que la medida busca “obligar a la bancarización pero con sus altas tarifas incluidas”.La polémica obligó a que Asobancaria saliera a aclarar la propuesta de su presidente.Puede interesarle: ¿Qué tan útil sería quitarle tres ceros al peso?El gremio señaló que realmente lo que pretende la iniciativa es que se le elimine dicho impuesto a las transacciones por medios digitales y se aplique únicamente a los retiros de dinero en efectivo superiores a $11,6 millones, correspondientes a 350 UVT mensuales, como también establece la norma que creó el impuesto en medio de la crisis de 1998-1999.

Asobancaria destacó que “la propuesta incluye que se mantengan los beneficios tributarios y exenciones que actualmente cobijan a las transacciones inferiores a 350 UVT mensuales, así como a los productos de Trámite Simplificado, como Depósitos Electrónicos, Cuentas de Ahorro Electrónicas y Cuentas de Ahorro de Trámite Simplificado. Por lo anterior no se afectarían en ningún caso las compras de bienes de consumo”.El gremio también recordó que “la economía se ha visto incentivada a usar el efectivo como medio de pago cotidiano, lo anterior se ha materializado en el incentivo para la promoción de actividades ilegales como corrupción, evasión fiscal, lavado de activos y financiación del terrorismo, entre otros”.Lea también: Por qué no quitarle tres ceros al peso, según Asobancaria