En el artículo publicado el pasado 23 de julio se reveló que los transportes masivos operan con toda su capacidad instalada, pero solo pueden transportar a una pequeña parte de sus pasajeros y esa es la raíz del problema. Con la llegada del coronavirus los medios de transporte redujeron su capacidad de funcionamiento, ya que hay que mantener un distanciamiento físico que antes de la pandemia no se respetaba. De hecho, la ministra de Transporte, Ángela María Orozco, señaló: “En las horas pico, antes de la pandemia, llegaban a tener 7 personas por metro cuadrado”. Situación que no se podrá volver presentar en el mediano plazo. Este es el artículo ganador: La billonaria crisis de los transmilenios “La situación revela el estado de paradoja que deja la pandemia: no es posible utilizar el sistema público en su máxima capacidad, pero utilizarlo en sus mínimos se vuelve un problema social, financiero y fiscal de magnitudes billonarias”, señaló el artículo realizado por el editor jefe de la Revista Dinero. No obstante, el Gobierno a través de líneas de crédito buscaba que los sistemas masivos “taparan” el hueco que dejaba la pandemia. Sin embargo, el artículo reveló que, “el crédito a siete ciudades solo cubre alrededor de $700.000 millones, lo que quiere decir que habrá un déficit de $1,6 billones y las ciudades tienen que pensar cómo lo van a cubrir”. Además, que las ciudades que presentan los huecos fiscales más grandes son: Bogotá, Cali y Medellín. Por su parte, para poder cubrir los huecos que hay en el sistema de transporte se debería reactivar en su totalidad, pero al hacerlo se pueden convertir en los principales canales de transmisión de la covid-19. Lea también: Así quedaron las aerolíneas en Colombia tras un año de pandemia Pero, “alguien va a tener que pagar ese déficit. Los contribuyentes, por la necesidad de más recursos para cubrir el hueco. Los usuarios, si algún operador privado termina en la quiebra y no puede ofrecer el servicio. Los empresarios, que terminan perdiendo su inversión. O hasta los bancos, que pueden evidenciar que esta cartera se les vuelve irrecuperable. Por eso es necesario buscar una salida; pero el camino que lleva a ella no se ve despejado”. “El futuro de los sistemas de transporte masivo va a estar en el centro de la agenda pública. Es necesario y urgente resolver este tema para garantizar que continuarán y mejorarán estos servicios”, añade el artículo.