Esa estrategia de Uribe tiene varios propósitos. Algunos exparamilitares dirán que el expresidente nada tiene que ver con el paramilitarismo. Otros asegurarán que Iván Cepeda los visitó para pedirles incriminar al exmandatario. Y otros alegarán que el testigo clave contra Uribe, un supuesto exparamilitar llamado Juan Guillermo Monsalve, nunca fue paramilitar de verdad. El gran interrogante es qué van a decir los dos que Uribe extraditó: Mancuso y Don Mario.