Estos springer spaniels ingleses, tradicionales perros de caza, están específicamente entrenados para detectar la notoria superbacteria Clostridium difficile. Dicha bacteria ataca a las personas cuyo sistema inmunitario ha sido debilitado por los antibióticos y causa una diarrea infecciosa potencialmente letal.Pero desde el verano pasado Angus ya encontró a la temida bacteria en un centenar de lugares distintos del Hospital General de Vancouver, donde trabaja.Puedes tomar ideas de esto: Davos, el perro que recauda recursos para refugios de animalesEn una ocasión Angus, que tiene dos años, detectó C difficile en los pantalones vaqueros de un paciente que había llegado con diarrea al hospital y al que le estaban dando el alta. En marzo de este año el perro terminó con éxito su período de prueba y otro spaniel, Dodger, se unió a su equipo.Una casualidad y una idea loca que se hizo realidadHace tres años la residente de Vancouver Teresa Zurberg, sufrió una infección por C difficile que casi la mata: la dejó cinco días ingresada en el hospital y le hizo perder nueve kilos.
Fotografía: BBC MundoSu marido, un enfermero que trabaja en seguridad sanitaria, le comentó por casualidad que había leído un artículo sobre un perro de raza beagle que había sido entrenado en Holanda para detectar a la superbacteria en los pacientes.Teresa, cuya profesión precisamente era entrenar perros para detectar drogas y explosivos, pensó que si la superbacteria tenía algún olor ella podría entrenarlos para identificarlo.Y así fue como le presentaron la idea a las autoridades sanitarias de la región, Vancouver Coastal Health, donde decidieron probar el plan con un programa piloto.Un problema global y un círculo viciosoLas infecciones por C difficile son un problema en hospitales de todo el mundo y representan un círculo vicioso que hace que los pacientes tengan que prolongar su estadía en el hospital y así aumente el riesgo de nuevas infecciones.Según Vancouver Coastal Health en Canadá el 64% de todos los casos de C difficile son adquiridos en hospitales, y un 28% son adquiridos en la comunidad.Te recomendamos: Policía le dio trabajo y hogar a un Pitbull que había sido abandonado
Fotografía: BBC MundoLa superbacteria vive en materia fecal que permanece en las habitaciones de los hospitales incluso después de la limpieza. La gente puede infectarse al tocar superficies contaminadas y después llevarse las manos a la boca. Los trabajadores del hospital también pueden propagarla entre los pacientes si contaminan sus manos.Normalmente en los hospitales se usa luz ultravioleta para encontrar C difficile, pero Angus y Dodger pueden hacer el proceso de detección mucho más rápido. Cuando el perro percibe la presencia de la bacteria un robot que utiliza luz ultravioleta desinfecta la zona, con un 99,9% de eficacia.El entrenamiento para detectar la superbacteria es el mismo que para oler otras sustancias. Teresa Zurberg tardó 10 meses en entrenar a Angus, que empezó a trabajar en el hospital en verano de 2016, cuatro días a la semana.El proyecto con Angus atrajo la atención de muchos países, como Finlandia o Chile, que se interesaron por el modelo. Ahora Zurberg planea entrenar a otros perros que puedan ser utilizados en otros hospitales del mundo.Conoce esta emotiva historia: Los besos de una mamá Pitbull a sus cachorros rescatados